Historia

“Álbum de Cromos. Matonismo en Villena (1906-1931)”: historia por entregas, por Mateo Marco

En diciembre de 2004 el escritor y colaborador de EPdV Mateo Marco Amorós (Villena, 1963), publicó su libro "Álbum de cromos. Prostitución en Villena (1906-1931)". Un libro prologado por el catedrático Ángel L. Prieto de Paula e ilustrado por la pintora oriolana Isabel Aparicio Ibáñez. Desde entonces, Mateo Marco barajó la idea de realizar un nuevo álbum que tratara sobre otro mundo marginal, el del matonismo, no alejado en ocasiones del de la prostitución, pero manifiesto también en otros entornos. Así que, cada mes, en la edición impresa de EPdV, podrán encontrar un capítulo o capítulos –una "estampa" o "estampas"– sobre sucesos acaecidos en el primer tercio del siglo XX en Villena o relacionados con Villena, que vendrán ilustradas con una obra de Isabel Aparicio Ibáñez.
Primera estampa: “De ronda”
Lo escribió el polifacético Benjamin Franklin: "Las mujeres y el vino, los juegos de azar y las mentiras amenguan las riquezas y aumentan las necesidades."

Ahora no estamos para valorar lo machista o no de la cita porque se escuchan voces de ronda. Y cuidado. Mucho cuidado que por ahí viene campando lo bruto. Y si no, oigan, oigan: "El saber leer y escribir / cuasi no sirve de ná / porque si vas a reñir / un 'regorve' vale más".

El matón es un chulo. Un pincho. Un jactancioso. El matón es un bravucón. Cualquier ámbito es propicio para mostrar su chulería, pero más la muestra cuando median las hembras. Porque cuando median las hembras, además del matón, florece el gallito. Y también más chulería hay cuando se actúa en compaña. Porque entonces hay que exhibirse. Y sobre todo por la noche. Cuando falta la luz. Cuando falta la luz y las luces. Cuando tantos animales de rapiña. Sigamos escuchando estas coplas rondeñas, retadoras, chulescas:

"Cuatro vamos a la ronda / y los cuatro con albarcas / y no les tenemos miedo / a los de las alpargatas." La rima, asonante, parece incluso un poco forzada pero lo que importa es dejar claro lo que hay que dejar claro: Que no hay miedo. Que contra los otros no hay miedo. Ítem... "En esta calle hay un pincho / y dice que va a beber / sangre de un amigo mío: / salga, que lo quiero ver." Otrosí... "En esta esquina me paro / y aquí planto mi bandera; / el que quiera llevar palos / ya puede salir pa fuera." O parecida pero más localizada: "En esta esquina me paro / y aquí planto mi bandera; / el que quiera llevar palos / que salga a la Corredera."

Que no. Que no hay miedo. Sólo fuerza. Fuerza bruta. Un que quede claro. "Esta noche rondo yo / esté raso o esté nublo, / y he de romper la guitarra / en las costillas de alguno.". Y de nuevo en la esquina y la bandera: "En esta esquina me paro / y aquí planto mi bandera; / el que sea curro y guapo / que se acerque a mi morena."

La esquina, la bandera y las puñaladas, aunque en el que sigue –que no nos despiste el miedo– es piropo muy zalamero de la pretendida: "Esta noche lloverán / puñalaítas de acero, / que me ha dicho un guapetón / que me va a cortar el cuello... / el cuello del camisón." Pero el reto, atosigante, continúa: "Si alguno hubiera sabío / la función que se le espera / se hubiera metío en su casa / corriendos por la gatera." Y... "A las dos de la mañana, / abre, que soy 'El Moreno' / el que corta el bacalao / por toíto este terreno." (1)

Sí. Por la anoche quedan estas tonadas para atrevidos valientes. Como reto. Que la calle, por lo oído, tiene amos. "En esta esquina me paro..."

Notas
1. SOLER GARCÍA, J.M. (1986), Cancionero popular villenense, Instituto de Estudios Juan Gil-Albert, Alicante. Coplas número 571, 777, 780, 781, 782, 785, 787, 788, 790 y 791. Reeditado en 2006 por el Ayuntamiento de Villena.

Segunda estampa: “Lacra”
El juego con dinero provoca peleas. Y ruinas. François Cocardon, alias Mustafá de Six-Fours, galeote que fue en Argel, recordando advertencias paternas, ya lo tenía claro allá por el mil setecientos veintiocho cuando escribe sus memorias:

"Pensaba que si empleaba buena parte de mi tiempo en las tabernas, acabaría por sucumbir a la tentación del juego, que es uno de los vicios más extendidos en este mundo, y uno de los más peligrosos según decía mi padre, pues es sabido que consume herencias, deja a las hijas sin dote y a los hijos sin patrimonio. Es verdad que los turcos de nación no acostumbran a jugar dinero, pero los renegados, que son multitud en Argel, suelen empeñar sus ganancias en toda especie de juegos, que provocan frecuentes peleas." (1)

Consume herencias, deja a las hijas casaderas sin dote, deja a los hijos sin patrimonio y provoca frecuentes peleas. El juego.

José María Reyes –pseudónimo de José María Navarro López– dirigió el semanario "El Bordoño" durante un año y pico. Concretamente lo dirigió desde el número 11 (26.08.1906) hasta el número 69 (06.10.1907). Su pluma virulenta contra los juegos prohibidos en la ciudad fue su propia tumba como director. Le sustituyó Francisco Cerdán García. Las razones del cese las explica, en nombre de la redacción, Rodolfo Marco. Reyes se había tomado muy en serio la campaña del periódico contra los juegos prohibidos. El problema, según Marco, se producirá cuando sin contar con la redacción pero utilizando a ésta, el Director escribió al Gobernador Civil. Hace años, así lo explicamos cuando nos interesó "El Bordoño":

"Parece ser que fue la gota que colmaba el vaso pues había habido, antes, disparidad de criterios entre los redactores y el director respecto al cariz que estaba tomando la campaña, pensando algunos que ésta perjudicaba los intereses de la publicación. Así, los copropietarios deciden el cese. Ante los rumores que circulan sobre la posible connivencia de 'El Bordoño' con los propietarios de los locales donde se jugaba a 'los prohibidos', Rodolfo Marco insiste en que 'El Bordoño' seguirá luchando y denunciando la ilegalidad: '(...) nuestras campañas serán las mismas; la política de campanario continuará alejada de nuestras columnas; combatiremos con todas nuestras fuerzas toda clase de abusos; lucharemos contra el juego, la prostitución y los excesos que consigo llevan; iniciaremos y secundaremos todas las campañas que creamos convenientes para nuestro pueblo y seremos siempre leales defensores de los humildes y de los oprimidos contra los abusos de los poderosos. Las columnas de este periódico han estado y estarán siempre a disposición de todos los hombres de buena voluntad.'" (2)

No obstante los buenos propósitos, si José María Reyes había sido destituido por su campaña contra el juego, otro director de "El Bordoño", Eduardo Pedrón Martí, lo sería por connivencia. Parece ser que el señor Pedrón, seguramente a cambio de silencio, pidió dinero a los responsables de los juegos prohibidos. En un primer momento la redacción del popular semanario desmintió las acusaciones pero... Pero resultaron ciertas. La publicación, pidiendo disculpas, necesitó un respiro. (3)
Víctimas del juego. Víctimas. No eran las únicas. La denuncia contra los prohibidos, antes y después de "El Bordoño", fue tema recurrente en los periódicos. (4)

Notas
1. BENNASSAR, B. (1996), El galeote de Argel. Vida y hechos de Mustafá de Six-Fours, Edhasa, Barcelona, p. 147.
2. MARCO, R. , "Expliquémonos". En El Bordoño, 70 (20.10.1907). Citado en MARCO AMORÓS, M. (1995-1996), "El afán regeneracionista. El semanario 'El Bordoño' de Villena (Alicante) (1906-1913)". En Actas de las Jornadas sobre Prensa y Sociedad en la Murcia Contemporánea, Anales de Historia Contemporánea, Universidad de Murcia, vol. 11-12, Murcia, pp. 247-262.
3. Íbidem. MARCO AMORÓS, M., "El afán...".
4. Véase MARCO AMORÓS, M. (2007), "Los quijotes de la pluma". Introducción a César López Hurtado, Mateo Marco Amorós (Coord.), José Puche Acién (2007), Periodismo y sociedad. Villena, 1881-1999, Instituto Alicantino de Cultura Juan Gil-Albert, Alicante, p. 41.

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