A veces, me da por recordar
A veces, no sé por qué, o quizás sí, me da por volver la vista atrás. Y esta vez le ha tocado a un libro de texto del año 61. Se trata de una enciclopedia que todavía obra en mi poder, su título: Examen Enciclopedia para Ingreso de Bachillerato, de la Editorial VicensVives, 1961. Y que estaba destinada a niños de 10 a 12 años, y quiero entender que también a niñas, que, aunque no las nombraba, se sobreentendía.
Entre otras perlas que ofrecía el franquismo a quienes iban a iniciar estudios superiores quiero destacar en Historia el tema dedicado a la España Contemporánea. Y es que pasa por alto, es decir, ni las menciona, la Dictadura de Primo de Rivera, la 2ª República y la Guerra Civil. ¡Cómo si no hubieran existido! El capítulo dedicado a este tema hace una breve mención a los reyes más importantes que volvieron a gobernar en España acabada la Guerra de la Independencia, a las luchas entre absolutistas y liberales y a los grandes progresos técnicos de los (siglos XIX-XX), a saber: construcción de los primeros ferrocarriles, alumbrado eléctrico, telégrafo, teléfono, automóvil
de los que España se benefició mucho. Y acaba el tema con el siguiente punto: Desde 1939 rige los destinos de nuestra patria el Generalísimo Franco.
En aquella época, aunque yo era pequeña, ya sabía que en España hubo una guerra y que los nacionales, con Franco a la cabeza, la ganaron. También sabía que aquella guerra trajo consigo muchos encarcelamientos, paseos y penas de muerte.
Yo no llegué a realizar el examen para ingreso de Bachillerato, pues mi familia necesitaba que cuanto antes comenzara a trabajar, así que a esta enciclopedia le siguieron el 1º y 2º grado de la Enciclopedia Álvarez (no dispongo de ninguna de ellas), pero conservo en mi memoria el adoctrinamiento a que nos sometían. Recuerdo el dibujo del mapa de España roto en dos pedazos con la hoz y el martillo amenazantes, la Guerra Civil era representada como una cruzada contra los rojos y el comunismo y que el Glorioso Alzamiento Nacional salvó a España de caer en manos del marxismo. Lo bueno era lo católico y lo español, lo malo lo masónico y lo liberal.
A veces, no sé por qué, o quizás sí, me da por volver la vista atrás cuando escucho que no es el momento de realizar tal o cual acción reivindicativa. Recuerdo que en los inicios de la democracia, de las primeras libertades después de 40 años de dictadura, quería poner en valor los derechos de las mujeres, que, aunque la Constitución los reconocía, no eran todavía efectivos, pero se me decía, se nos decía, que no era el momento, que había otras prioridades.
Han pasado 40 años y todavía hay quienes dicen que no es el momento, o que ya está todo conseguido. Pero ni lo uno, ni lo otro. Es el momento, siempre ha sido el momento. Cuando se tienen las cosas claras y hay voluntad de llevarlas a cabo, siempre es el momento. Es el momento de reivindicar con una huelga que las mujeres somos más de la mitad de la población mundial y se nos ha de tener en cuenta. Lamento que los sindicatos mayoritarios no hayan apoyado la huelga de 24 horas del día 8 de marzo, pues, aunque es difícil de llevar a cabo, sobre todo para las mujeres que tienen trabajos precarios o sin contrato, es importante que el apoyo sea masivo.
El 8 de marzo huelga feminista. Paramos nuestro consumo, paramos nuestro trabajo doméstico, paramos los cuidados, paramos nuestro trabajo remunerado, paramos nuestros estudios. ¡Si nosotras paramos, se para el mundo!