Hace algún tiempo ya escribimos con motivo de las inundaciones que padecemos en la zona del camino San Juan, pero seguimos en la misma línea. El pasado miércoles 22 de julio fue otra tarde de órdago para nuestras instalaciones, puesto que a las 5 de la tarde más que en el trabajo parecía que estábamos en la piscina, con diversos apartados totalmente anegados y sin poder acceder para nada.
Seguimos padeciendo las embestidas del tiempo (y eso que llueve poco), porque si al menos fuera una nube o lluvia que cayera directamente pues bueno, sería un problema interno, pero el caso es que aparte de ese agua que nos cae, no paran de entrar aguas fecales por el alcantarillado público. Es decir, que no es que salga, es que encima nos revoca de fuera a dentro con la consiguiente acumulación y, como ya hemos dicho anteriormente, inunda diversas zonas dañando distintas áreas de trabajo de nuestra empresa.
Esto lo venimos padeciendo desde mayo de 2011 (el famoso día del rayo al castillo), y lo estamos denunciando desde entonces, lo único que pedimos es que se ponga solución a este grave problema, ya que aparte del incordio que ocasiona, lógicamente hay unos gastos añadidos para retirar toda la porquería y reemplazar el material u otras materias dañadas que no benefician a nadie. Solo pretendemos que, por favor, se ponga fin a este sinvivir cada vez que se presenta una nube de estas características.
Ni mucho menos pretendemos criticar a la Corporación que está o ha estado, solo pedimos poder trabajar en unas condiciones óptimas sin tener que pasar estos tragos tan a menudo y que a quién corresponda intente poner los medios necesarios lo antes posible para evitar seguir padeciendo una y otra vez esta situación tan incómoda.
