Ahora van repartiendo misales
Si no lo veo no lo creo: los progres de Villena escandalizados por una fiesta para jóvenes, perturbados por la presencia de unas odaliscas, trastornados por la presencia de unos DJ, enajenados porque se va a montar un fiestorro, Supermartxé, que es sinónimo de éxito entre nuestros jóvenes.
Sus desafortunadas declaraciones, rancias y fuera de época, han conseguido una revuelta juvenil en las redes sociales. En Facebook hay cerca de setecientos chavales que apoyarán y asistirán a la fiesta, en Twitter unos mil jóvenes se ríen de esta iniciativa progresista, y en Tuenti pasan ya de los mil cuatrocientos jóvenes protestando por ese cutre-intento de malograr una fiesta que se ha paseado por toda España con aplastante éxito. ¡Pobrecicos jóvenes, alienados por el poder! ¡Pero aquí estamos nosotros, los progresistas, que les haremos ver que Supermartxé es el opio del pueblo!
La situación es tan de chiste que hasta los periódicos de Ibiza, donde se gestó este tipo de fiestazo, se han hecho eco de las declaraciones de estos progres (que, al parecer, se quedaron pillaos en los 70) y han calificado estas declaraciones de rancias y medievales. Ya existen en Villena fiestas similares: una la organiza MQR; otra, los universitarios; otra más, famosa ya, es la Fiesta Pirata. En todas ellas se llega a reunir a varios miles de jóvenes con ganas de diversión. Esta es la realidad para quien la quiera ver, y aconsejo a estos rancios políticos que se paseen por alguna de estas fiestas, para que vivan de primera mano que estamos en 2011, que la España del NO-DO y el blanco y negro ya hace mucho tiempo que pasó.
Y ahora, con la Plaza de Toros y el apoyo del Ayuntamiento, tenemos la oportunidad de disfrutar, entre otras cosas, de fiestas para los jóvenes, pero una vez más nos encontramos con una clase política, en este caso en la oposición, que intenta paralizar este tipo de iniciativas, y lo que es más chocante, con la excusa de esta izquierda progresista de que, como nos descuidemos, nuestros jóvenes le van a ver las tetas a alguna de las gogós, ¡qué escándalo, señora!, y no contento con ello nos hablan de ocio consumista, de sexo y de drogas. Y esto lo dice ni más ni menos que el señor que pretende ser alcalde de Villena, nada menos que el candidato a Alcaldía por los verdes, Javier Esquembre. Imagínense que llegara a Alcaldía: con esos planteamientos, ¿cuál sería la programación de ocio para nuestros jóvenes? Talleres educativos, lectura continuada de poesía alternativa con suelta de globos o jornadas de terapia Zen, sin olvidar algún cursillo de orientación sexual no discriminatoria con talleres de autosatisfacción (que esto último no debería escandalizar a nadie). En fin, todo eso que ellos entienden como ocio saludable, ideal para vivir en un mundo lleno de color.
Comprendo la reacción de los jóvenes villeneros a través de las redes sociales. Nuestros jóvenes han hablado como ellos saben hacerlo: en la red, y espero que eso haga que nuestra rancia oposición recapacite y deje de seguir metiendo la pata. Ya la ha estado metiendo toda esta legislatura, atacando a nuestra plaza de todos. Gobernando no pudieron cargarse la plaza, no tuvieron valor para ello y, ahora, estando en la oposición mayoritaria absoluta, gracias al apoyo de unos tránsfugas del PP, tampoco han podido. Finalmente, en su nerviosismo, se echan a la juventud en contra, intentando paralizar, primero, la programación de las actividades de la plaza y, después, intentando escandalizar al respetable con el fantasma de que el PP nos va a traer al demonio a Villena. ¡Vade retro Supermartxé, vade retro!