Ahorro e Inversión: Antes de firmar, ¡valorar!
Aproximadamente el 60% de las personas en España han contratado una hipoteca. Actualmente nos encontramos con un escenario en el que los tipos de interés, en mínimos históricos, nos hacen plantearnos cuál sería la mejor opción a la hora de firmar. Cuando nos disponemos a contratar una hipoteca tenemos distintas opciones. Entre ellas, las más sonadas y conocidas por casi todos son dos:
Préstamos a tipo fijo: El tipo de interés es constante durante toda la vida del préstamo. Si elegimos esta opción, el movimiento de los tipos de interés, tanto subidas como bajadas, no nos va a afectar.
Préstamos a tipo variable: El tipo de interés aplicable variará en función de la evolución de los mismos a lo largo de la vida del préstamo. Es decir, la tasa real habrá sido más alta o más baja en función de si los tipos de interés han subido o han bajado.
Ahora bien, para poder valorar estas opciones deberíamos conocer los datos históricos y las perspectivas a futuro sobre los tipos de interés. Además debemos tener en cuenta cuál es el tipo fijo que nos ofrece la entidad, y también el plazo por el que vamos a firmar nuestra hipoteca.
En cuanto a las perspectivas, se esperan crecimientos futuros muy moderados y con una tasa de inflación baja, motivo por el cual hay que suponer que no subirán los tipos. En todo caso el mercado hoy descuenta subidas para el 2019, por lo que el Euribor va a estar próximo a 0 durante un periodo largo de tiempo. Pero llegados a este punto y tras haber hecho esta pequeña reflexión, he de decir que para gustos, colores.
Para aquellos que crean que los tipos de interés se irán rápidamente a los niveles medios históricos, y en consecuencia no quieran asumir las fluctuaciones de los tipos de interés, les interesará una hipoteca a tipo fijo. De esta forma tendrán la tranquilidad de haber contratado un tipo fijo cuando los niveles estaban en el 0%. Aquí lo más importante es el tipo fijo que nos conceda la entidad.
Sin embargo, suponiendo que los tipos volvieran de manera progresiva a niveles del 2% seguiría siendo interesante contratar Tipo Variable. Es difícil hacer una previsión para los próximos 15 años, pero lo que sí parece más realista es suponer que los tipos de interés se mantendrán bajos durante los próximos años.
Otra de las opciones, no aconsejable, sería contratar un préstamo mixto. Esta opción tendría tipo fijo los primeros años (privándonos de los bajos tipos actuales) y variables después (cuando las subidas son más probables).