Álbum de cromos. Matonismo en Villena (1906 – 1931). Decimoquinta estampa: Pertenencias

En la habitación número 33 de la Fonda Nueva del Universo, el médico Sr. Martí, director del ramo de Higiene de Barcelona, examina los cadáveres de Leonor Guillén y Juan Requena. "Reconocidos los cadáveres, (...) se encontraron sobre el caballero tres monedas de oro de a 25 pesetas, una de diez, ocho de plata de cinco pesetas cada una, tres billetes de Banco de a 100 pesetas y otro de veinticinco, un magnífico reloj de oro con leontina y guardapelo del mismo metal, una cartera conteniendo un retrato de la interfecta, las cédulas de vecindad de uno y otra, un recibo satisfecho en Villena y varias tarjetas de visita. Sobre la señora se encontró un pañuelo blanco; con el que estaban envueltas doce pesetas, 44 céntimos en el portamonedas y unas tijeras de bordar. (...) La señora llevaba en las orejas unos pendientes al parecer de oro y diamantes. En el baúl había una pulsera y sobre la mesa un sombrero de señora de paja negra con velo." (1)
Practicadas las diligencias el juez Ballarín determinará que se conduzcan los cuerpos al cementerio del sudoeste, cementerio nuevo en Montjuic. La familia de Requena pagará para el viudo un nicho. Leonor reposará en la fosa común (2). Una fosa común que antes o después compartirá con restos de anarquistas, pobres de solemnidad, suicidas, delincuentes y marginados. Entre ellos los de Santiago Salvador, en 1894 condenado a garrote vil por el atentado en el Liceo. Años más tarde, los del pedagogo Francisco Ferrer Guardia, fusilado al considerarlo responsable civil de saqueos e incendios durante la Semana Trágica. Los de la "vampira" Enriqueta Martí... Entre ellos los de Leonor porque cuando Xavier Theros escribe sobre esta fosa común apostilla que "el caso más dramático tuvo por protagonistas a los amantes que en 1890 cometieron el llamado crimen de la Boquería, separados hasta en la muerte. A él le costeó un nicho su familia, mientras que ella acabó bajo una tumba anónima." (3)

El cementerio de Montjuic inaugurado en marzo de 1883 se cataloga dentro de la tipología del jardín inglés. La habitación número 33 en la segunda planta de la Fonda Nueva del Universo era una habitación estilo inglés. Donde las autoridades inspeccionan y... Se les acumula la faena. Porque al tiempo que reconocen la habitación y cadáveres se denuncia en el Juzgado otro suicido. Éste en la Fonda Nacional. El muerto presenta una herida en la sien derecha producida por un revólver. Revólver que se encuentra en la habitación. "Este desgraciado suicida –precisa "La Vanguardia"– se llamaba José Ramírez, de 57 años de edad, viudo y hacía treinta días que habitaba en dicha fonda, aunque comía en casa Esteve. Era hijo de padres italianos, y hacía más de cuatro años que lo trataba el dueño de la Fonda Nacional. / Era un hombre excéntrico, hipocondríaco, sin amigos y de vida misteriosa, aunque todos le tenían por honrado. Realizaba frecuentes viajes a América, a causa de tener una hija casada en San Francisco de California. / En la fonda no oyeron la detonación y suponen que este suicidio ocurrió ya en la noche anterior. / Este desdichado padecía de fuertes ataques de asma, y algunas veces había dicho que no fuera extraño que lo encontrasen muerto una mañana, pues eran inaguantables sus sufrimientos. / Pagaba con mucha puntualidad al fondista, por lo cual se cree que la falta de recursos no ha podido ser el móvil de su terrible determinación. / Habitaba un cuarto pequeño, y fue encontrado su cadáver al pie de la cama, boca arriba, en un charco de sangre. / El Juzgado se incautó de una colección de cartas que tenía en su baúl, ignorando si en ellas vienen revelados los motivos que le indujeron a acabar con su existencia." (4)

El corazón de la Rambla
Y resulta que la Fonda Nacional está también en la calle de la Boquería y la habitación donde el cadáver de Ramírez también en el segundo piso. Y ese cuarto en el segundo piso tiene el mismo número que la habitación donde la tragedia de Leonor y Juan, el número 33. El mismo que aquella habitación de la Fonda Nueva del Universo donde un pequeño sofá y un tocador y un lavamanos y unas sillas y una cama modesta con colgaduras y una mesita de noche y un baúl abierto. Donde después de aquella comida temprana, los tiros. Donde Leonor Guillén muerta en el suelo. Maestra. Donde las labores y dibujos que acreditaban su suficiencia y donde unas cartas de recomendación sus aspiraciones. Donde en el suelo una pistola, un revólver niquelado de cinco tiros de grueso calibre. Donde Juan Requena muerto y apoyado en el antepecho del balcón. Con un puro a medio fumar. Propietario. Desangrándose sobre el número 32 de la calle de la Boquería. Donde el corazón de la Rambla. La calle. Barcelona 1890. Una ciudad tranquilizándose poco a poco tras la intensa agitación obrera de los primeros días de mayo. Se nos escapa todo en el tiempo. Y la diversa información nos confunde.

Días más tarde de la tragedia, "La Dinastía" publica los datos del Registro Civil anotando en las defunciones los nombres de Juan Riquena –sic–, 51 años, y Leonor Guillén, 30 años. Y donde dice Juan Riquena –sic– se apunta Boquería 28, Iº. Y donde Leonor, Boquería 28 (Fonda) (5). Cuando este diario contó el suceso había dicho 52 años para Juan y 32 para Leonor. Y había dicho Juan Reguera. Y también que el ruido de un disparo había advertido a los vecinos de la fonda. Y que cuando se asomaron a la calle "observaron con asombro que un hombre aparecía en el balcón del piso segundo de la misma, empuñando un revólver con el cual se disparó un tiro, penetrándole el proyectil, según luego pudo observarse, en la cabeza." Y que le faltó "valor para arrojarse a la calle, porque aunque se abalanzó no logró su intento, quedando cadáver el infeliz en una actitud forzadamente inclinada." Y que "las circunstancias especiales en que se hallaban las víctimas (...) hace suponer que los celos hayan movido la mano criminal." (6)

A saber. Menudo lío, enorme tragedia.

Notas
1. "Del Diario de Barcelona". En El Liberal, Mahón, 09.05.1890.
2. "La tragedia de la calle de la Boquería". En La Vanguardia, 13.05.1890.
3. THEROS, X. (2012), "En la fosa común". En El País, 16.08.2012. Ver vínculo: http://ccaa.elpais.com/ccaa/2012/08/15/catalunya/1345055156_012580.html
4. "Otro suicidio". En La Vanguardia, 06.05.1890. El Liberal de Mahón –véase nota 1– le da una edad de 54 años y nacionalidad mejicana.
5. "Notas del registro Civil". En La Dinastía, Barcelona, 15.05.1890.
6. "Los tres crímenes de ayer". En La Dinastía... 06.05.1890.

Mateo Marco Amorós. Ilustración: Isabel Aparicio Ibáñez