Algunos retos turísticos ante la apertura del nuevo Museo de la Ciudad
El centro histórico de Villena está declarado Bien de Interés Cultural, con la categoría de Conjunto Histórico. Sus calles acogen gran parte de los elementos de mayor atractivo turístico de Villena, tanto tangibles (monumentos, museos, trama medieval
) como intangibles, pues es escenario de multitud de actos y eventos a lo largo del año.
Todo esto resulta un fuerte aliciente para el turismo, como demuestran las cifras de visitantes de los principales lugares de interés, la gran mayoría establecidos dentro del centro histórico. Así, en 2015, el Castillo de la Atalaya recibió 19.385 visitas, el Museo Arqueológico 13.130, la Iglesia de Santiago 4.522 visitas guiadas (no se contabilizan visitas en horario de culto) y el Museo Festero 1.591. El Centro de Visitantes y la Oficina Tourist Info, ambos en el centro histórico, registraron 13.536 y 6.771 visitantes respectivamente . Por tanto, podríamos decir que el centro histórico de Villena conforma el núcleo de la ciudad turística: aquella zona de un destino más transitada y visitada por los turistas.
El futuro traslado del Museo Arqueológico desde el Palacio Municipal a la Electroharinera supone recuperar y aprovechar un edificio icono de nuestro patrimonio industrial, además de hacer justicia al gran legado etnográfico de Jerónimo Ferriz. Pero a la vez, y en relación con lo anterior, desplazará la ciudad turística de Villena hacia la zona del Teatro Chapí, lo cual puede ir en detrimento del Centro Histórico, que pierde un potente equipamiento cultural.
Tradicionalmente, gran parte de los turistas que nos visitan llegan atraídos por el Castillo de la Atalaya, siendo para muchos el principal, e incluso el único reclamo para venir. Desde que abrió el Centro de Visitantes se ha aprovechado la recepción de los turistas al castillo para darles a conocer otros lugares de interés y así prolongar su estancia en Villena. A esto ayudó hace pocos años la creación de bonos de visita conjunta por parte de Turismo Villena, siendo los más exitosos los Bonos Castillo+Tesoro y Villena Esencial . Los visitantes que deciden adquirir estos bonos, en general y dada la cercanía, se trasladan a pie desde el Castillo hacia el Museo y viceversa, con lo que se genera tránsito de turistas por las calles del centro histórico. Este trasiego de turistas contribuye a normalizar la vida de sus calles más olvidadas y abandonadas pues, por ejemplo, motiva que el Ayuntamiento, en aras de ofrecer una buena imagen de la ciudad, mejore el estado de estas calles y las ponga en valor (ejemplos son las calles Libertad, Maestro Moltó, Empedrada, Rambla ). Junto a esto, el interés de los turistas por el centro histórico puede aumentar la estima hacia el mismo de sus residentes, y hacer que lo cuiden y lo defiendan. De igual modo, que sea una zona transitada por los turistas puede cambiar la percepción que del centro histórico tienen otros habitantes de la ciudad, hacer que lo pisen más y que lleguen nuevos residentes a sus calles. En esta línea vienen trabajando la AVV de El Rabal con eventos de gran atractivo para residentes y visitantes (Fiestas del Medievo, Rabalfest, Pasaje del Terror ) y el Ayuntamiento de Villena con el Mercado de las Flores, el CASC, el Mercado de la Tierra, etc.
El problema ante la futura reubicación del museo es que la distancia entre éste y el Castillo de la Atalaya se va a duplicar; lo que puede hacer que muchos visitantes prefieran salvar esta lejanía utilizando el coche (o el bus, en caso de grupos), con lo que no solo se reduciría el tránsito a pie de los turistas por las calles del centro histórico y calles aledañas (perdiéndose estos efectos positivos antes mencionados), sino que se generarían efectos negativos como el aumento del tráfico rodado por nuestras calles y, por tanto, una mayor contaminación de los vehículos, atascos, etc. También se reducirían las visitas turísticas a puntos intermedios (Plaza de Santiago Iglesia, Museo Festero, calle Mayor, Iglesia de Santa María, etc.), habría un menor gasto de los visitantes en las cafeterías, restaurantes y comercios del centro histórico y zona centro, al no pasar a pie por delante de los establecimientos... y en suma, una reducción de la estancia de los visitantes en nuestra ciudad.
Por tanto, Se necesita de una serie de acciones para salvar este obstáculo. Algunas necesarias son las siguientes:
Asegurar la apertura vespertina del Museo. En la actualidad el Museo Arqueológico José María Soler únicamente abre por las mañanas. Si hay visitantes que solo quieren ver el Castillo y el Museo, muchas veces sucede que quieren visitar ambos lugares por la mañana sin ni siquiera quedarse a comer en nuestra ciudad. Esto hoy día les es perfectamente posible dada la poca distancia a pie entre ambos lugares. Pero, estando el nuevo museo más alejado respecto del Castillo va a ser muy difícil que los visitantes vean ambos espacios por la mañana, porque si un visitante llega a Villena sobre el medio día (algo bastante habitual) y teniendo en cuenta que cierran a las 14:00, tiene apenas un par de horas para ver ambos lugares en el caso de que los quiera visitar por la mañana. Una distancia que antes se cubría en menos de diez minutos a pie, pero que ahora va a necesitar de mucho más tiempo, a no ser, claro, que se desplacen en vehículo. Abriendo el museo por las tardes, tal y como se viene haciendo con el Castillo desde 2011, se fomentaría la prolongación de la estancia y el gasto de los visitantes, pues podrán visitar un lugar por la mañana y otro por la tarde. Sin prisas, moviéndose a pie por la ciudad, y con suficiente tiempo para visitar otros lugares, comer e incluso entrar a algún comercio.
El punto anterior debe servir de incentivo para dejar el coche en el Centro de Visitantes y desplazarse a pie hacia el nuevo museo, pasando por el centro de la ciudad. Además, existe falta de aparcamiento en el entorno del nuevo museo; algo que vemos cada vez que hay algún espectáculo en el Teatro Chapí. Si a esto sumamos la zona azul del centro de la ciudad, tenemos dos importantes motivos para que los visitantes dejen los vehículos en el parking del Centro de Visitantes (o en otro aparcamiento) y se trasladen a pie. De este modo, tal y como hemos comentado, ampliaríamos la estancia de los visitantes en la ciudad, permitiríamos que caminasen por el centro y, por tanto, que sean más proclives a entrar a tiendas, consumir en bares, etc. Para ello es necesario la ampliación de plazas de aparcamiento del Centro de Visitantes, el cual, pese a su gran tamaño solo cuenta con dos plazas para vehículos particulares, más la de discapacitados, y tres para autocares. Pese a ello, es habitual que los turistas aparquen en el amplio espacio disponible de la explanada del parking, por lo que desde el Ayuntamiento se está estudiando aumentar el número de plazas disponibles.
Tanto desde el Centro de Visitantes y la Oficina Tourist Info, como desde turismovillena.com y otros medios de información previos a la visita, se ha de hacer ver a los turistas que la distancia entre el castillo y el museo, realmente no es tan grande, sobre todo si está jalonada de otros puntos de interés a visitar. Para esto se deben diseñar rutas a pie que conecten ambos espacios y que cuenten con puntos intermedios de visita. Los bonos de visita conjunta que actualmente ofrece la concejalía son muy útiles, pero habrá que combinarlos con rutas a pie ya sea en folleto, apps móviles, guías turísticos, etc. que fomenten la visita de lugares de interés que se encuentran entre los dos monumentos. Lugares como las Casas-Cueva Tuareg, las Iglesias de Santa María y Santiago, las Ermitas de San Antón y San José, el Museo Festero, el Palacio Municipal, la Plaza Mayor, el Museo Navarro Santafé, la Plaza de las Malvas, y otras plazas y calles con encanto del centro histórico. Aunque estos puntos de interés ya están presentes en la web de Turismo Villena, la concejalía de Turismo está preparando rutas a pie que unan el Centro de Visitantes y Castillo con el nuevo museo a través del centro histórico y la Plaza de las Malvas.
Estas rutas antes mencionadas deben permitir conectar a pie el Centro Histórico con el nuevo Museo de la Ciudad; conexión que puede partir desde la Plaza de Santiago a través de un recorrido que vaya por Callejón del Chicho, cruzando hasta calle Congregación, Plaza de las Malvas y calle Trinidad. Y de ahí seguir hasta el nuevo museo, o adentrarse por la calle peatonal de San Francisco, recién arreglada, para llegar al Teatro Chapí y al Paseo. Este recorrido, además de contar casi por entero con calles peatonales, permite pasar por delante de lugares de interés como las Trinitarias, la calle Congregación, la Plaza de las Malvas y el Palacio Mergelina-Asilo. Otras calles perfectas para enlazar son Coronel López Tarruella, que baja de Plaza de Santiago; y sobre todo Párroco Azorín (llena de fachadas decimonónicas, y enlazando directamente con la bajada del Castillo por las arregladas y pintorescas calles Empedrada y Maestro Moltó), para lo cual estas calles se deberían poner en valor con diversas acciones como por ejemplo la colocación del adoquinado establecido en el Plan Especial del Centro Histórico. Dicha conexión también sería positiva para la calle Corredera, una de las principales arterias comerciales de la ciudad pero muy afectada en los últimos años por el cierre de establecimientos y el desvío de la zona comercial hacia los Salesianos.
Las rutas que conecten el Castillo con el nuevo museo no funcionarán si no se sigue trabajando en la recuperación y puesta en valor del Centro Histórico de Villena, y con esto también de la Plaza de las Malvas, que también forma parte del mismo, y que sirve para enlazar con el nuevo museo. Para lo cual se debe respetar el Plan Especial del Centro Histórico, tanto por parte de residentes y propietarios como del Ayuntamiento. Hay que cumplir lo establecido en cuanto a volúmenes, formas y colores de las fachadas, alturas de los edificios, cerrajerías, carpinterías y zócalos, tejados, canalones, disposición de aparatos de aire acondicionado, motivos decorativos, etc. Además, se debe seguir recuperando y poniendo en valor el patrimonio cultural que atesora (iglesias, ermitas, Plaza Mayor, restos de muralla, Torre del Orejón, palacios...). Se necesita seguir trabajando por la recuperación comercial de sus calles fomentando la apertura de nuevos negocios o al menos, tratando que los ahora existentes se mantengan. También es muy importante mejorar su limpieza viaria, especialmente los fines de semana y festivos, que es cuando más visitantes vienen. En relación a esto, no solo es preciso reforzar el servicio actual de limpieza, sino también concienciar a residentes, bares, locales de peñas, escuadras y amigos. Y, por supuesto, se debe seguir trabajando en eliminar los guetos y bolsas de marginalidad: con acciones de integración, llegada de población normalizada (que afortunadamente cada vez va a más), presencia policial Hay que reconocer que se han logrado grandes avances en todos estos ámbitos, pero se debe seguir trabajando con más ahínco y sin desistir.
Mejora de la movilidad de residentes y turistas: Es evidente que la trama urbana del centro histórico no se diseñó para el automóvil. Por este motivo, se trata de calles especialmente sensibles ante el paso de vehículos de motor: poco espacio para peatones al pasar los coches, amplificación del sonido de los motores por la estrechez de las calles, falta de aparcamiento, bloqueo de calles y aceras por coches mal estacionados, daños en el patrimonio ocasionados por la emisión de CO2 (la fachada de la Iglesia de Santiago es un buen ejemplo de ello), etc. Además, muchos vehículos aprovechan el eje formado por la calle Baja-calle Mayor-calle San Antón para evitar el tráfico de las calles Nueva, Corredera y Joaquín María López, lo que incrementa el número de vehículos por el centro histórico. En este sentido, Villena necesita una peatonalización parcial de su centro histórico que solo permita la circulación de vehículos autorizados: residentes, cocheras, familiares de residentes con problemas de movilidad, vehículos de emergencias, taxis... en definitiva, personas que de verdad necesiten circular por sus calles. Así mismo, es importante crear aparcamientos disuasorios en los bordes del centro histórico, como el construido hace unos años junto al Centro de Visitantes. Aparcamientos que puedan ser usados tanto por turistas como por residentes, rebajando así la circulación de vehículos por el centro histórico. En relación a esto, el Ayuntamiento está preparando un plan de peatonalización del Centro Histórico que prevé implantar en breve.
En línea con todo lo anterior, se debe potenciar la Plaza de Santiago como punto de visita obligada entre el Castillo y el nuevo museo, para lo cual hay que convertirla en un lugar más amable y atractivo para residentes y turistas, dado su gran valor como centro neurálgico de la vida villenense. Y también, por su valor histórico y urbanístico, con edificios que van desde el siglo XV hasta el XX; y diferentes estilos arquitectónicos: desde el gótico y el renacimiento, hasta la imponente fachada decimonónica del Palacio Selva, o la peculiar fachada de estilo brutalista de la Casa de la Cultura. Para ello se hace ya muy necesaria la peatonalización de la plaza, siempre llena de coches, y poner en valor sus edificios con una reurbanización de la misma.
Además, Una vez se desplace el Museo Arqueológico Municipal a sus nuevas dependencias, no se debería cerrar el Palacio Municipal (Ayuntamiento) los fines de semana y festivos. Sino que al menos durante las mañanas, debería ser visitable su claustro, e incluso el precioso Salón de Plenos municipal. De este modo, se mantendría el edificio (declarado Bien de Interés Cultural) dentro de la oferta de lugares visitables de nuestra ciudad, y reforzaría la necesidad de los turistas de visitar la Plaza de Santiago.
Pero si queremos prolongar la estancia de los visitantes en Villena, lo más necesario, sin duda, es la apertura de nuevos alojamientos turísticos. Contamos todavía con una oferta reducida (solo 107 plazas en 2014 ), algo que acaba generando la llegada de falsos turistas, que vienen a visitar Villena pero que acaban pernoctando en poblaciones vecinas con mayor capacidad (Biar, por ejemplo, cuenta con 218 plazas). En este sentido, se debe seguir fomentando la apertura de nuevos alojamientos, tal y como están haciendo las concejalías de Turismo y Centro Histórico desde hace unos años. Así, parece que Villena camina por fin en la buena dirección, con la apertura de un alojamiento no hace mucho en la calle Mayor, la inminente apertura de otro cercano al Castillo, y la inclusión de al menos otro más en el futuro.
Por último, es necesario seguir trabajando en la creación de productos turísticos que inciten a pasar una estancia prolongada en Villena, para lo cual es clave la colaboración público-privada. Así, eventos de mayor solera como los Moros y Cristianos, las Fiestas del Medievo, la Semana Santa o la Muestra Villena, se están viendo completados con otros más recientes como los festivales de verano, Atalaya Experience, la Happy Night, Artefiesta, el CASC o el novedoso VEM. La Ruta del Vino o la reciente implantación del sistema de calidad turística en destino (SICTED) son acciones dirigidas a dinamizar nuestra oferta privada, de cara a ofrecer una imagen más completa del destino Villena.
En conclusión, la apertura del nuevo Museo de la Ciudad supone un reto enorme para el desarrollo del turismo en Villena y, sobre todo, para el Centro Histórico, que verá alejarse uno de sus principales puntos de atracción turística. Este nuevo museo, sin duda, traerá consigo un crecimiento de las visitas turísticas a Villena, posiblemente mayor que el que supuso la reapertura a finales de 2013 del Castillo de la Atalaya tras año y medio de obras. Es por ello importante llevar a cabo acciones que permitan aprovechar la mayor llegada de turistas, potenciando el Centro Histórico como nexo de unión entre el Castillo y el nuevo museo, para de este modo contribuir a su recuperación, prolongar la estancia de los visitantes en nuestra ciudad y aumentar su impacto económico.
Samuel Martínez
Turismólogo
1. Estadísticas de visitas turísticas 2015. Concejalía de Turismo. M.I. Ayuntamiento de Villena.
2. Castillo + Tesoro permite la entrada al castillo y al Museo Arqueológico Municipal, mientras que Villena Esencial también permite entrar a uno de los tres siguientes espacios a elegir: Iglesia de Santiago, Museo del Festero y Museo Navarro Santafé.
3. Oferta Turística Municipal y Comarcal de la Comunitat Valenciana 2014. Agència Valenciana del Turisme.