Ana Mas será la única liberada del PP, que cuestiona el recorte de cargos impuesto por el equipo de gobierno
El portavoz popular, José Joaquín Valiente, ha informado sobre la decisión definitiva tomada por el alcalde, Francisco Javier Esquembre, sobre el recorte de concejales liberados y cargos de confianza impuesto por el gobierno central a través de la Ley de Reforma de la Administración Local.
Tras una primera reunión infructuosa de la Junta de Portavoces, en la que se le ofreció al PP mantener dos personas con dedicación parcial (al 50% cada una) o una con dedicación del 90%, en una segunda reunión, y ante la postura inamovible del equipo de gobierno, el PP tendrá finalmente una persona Ana Mas con una dedicación del 95%, según ha confirmado el alcalde, decisión que el PP asume y acata, aunque no está de acuerdo con ella, decía Valiente.
Según el portavoz popular, el alcalde se ampara en la nueva Ley para coartar la labor de oposición del Partido Popular, que cuenta con 10 concejales y el 44% de los votos, quedando a 500 votos de la mayoría absoluta. Además, añade Valiente, la justificación del alcalde no es válida, porque él mismo está incumpliendo la ley con los cargos de confianza, cuya suma de sueldos da 8 cargos, en lugar de los 7 que marca la ley. En cuanto a los concejales liberados, Valiente señalaba que ahora mismo hay 10, lo que marca la ley, pero veremos qué pasa cuando se incorpore Jesús Hernández en sustitución de David Molina. En este sentido, recordaba que Juan Richart anunció su marcha pero ésta aún no se ha producido, y aunque siga como concejal no ejerce como tal, pues no acude regularmente a trabajar y no atiende sus obligaciones tal y como merecen.
Asimismo, el edil popular cuestionaba que uno de los cargos de confianza suprimidos, Virtudes Amorós, de VCD, se haya incorporado a un puesto de trabajo en el ayuntamiento que no le corresponde, por lo que el ayuntamiento debe seguir pagando para cubrir su puesto y el supuesto ahorro a conseguir no es tal.
Ya se verá en el futuro
Por todo ello, Valiente considera que el Partido Popular es el mayor afectado por estos recortes, siendo el propio alcalde el que está marcando las reglas del juego. Si con 10 concejales solo da una dedicación parcial al PP, veremos qué pasa cuando los grupos de la oposición tengan menos concejales, decía, añadiendo que el PP debería tener como mínimo, dos concejales, aunque estaría dispuesto a aceptar si el equipo de gobierno redujera también sus concejales, cosa que no ha hecho.
Para concluir, Valiente insistía en que el reparto de concejales no es ajustado, y que se debería respetar la labor de oposición y a todos los votantes a los que representa el PP, añadiendo que posiblemente mantener los sueldos del equipo de gobierno sea lo que a final de mes, en los Plenos, haga que el tripartito, con tantos enfrentamientos como tienen sus miembros, siga levantando la mano junto.