Andrés Martínez descarta el Programa AGUA como solución para el Vinalopó y define a la Administración como “rastrera y engañosa”

En el marco de las Jornadas Técnicas sobre la explotación de los Acuíferos en el Vinalopó, el presidente de la JCU, Andrés Martínez, tuvo tiempo de comparecer junto a su homónimo del Altiplano murciano, Atanasio Molina, para denunciar los incumplimientos del Gobierno español respecto a su política hídrica.
Molina es el presidente de los usuarios del Altiplano, que comprende las tierras de Jumilla, Yecla y Pinoso. Aunque Aguas del Júcar parece haberse retractado ahora de su intención, los regantes sostienen que en su día la entidad estatal ofreció agua del Júcar-Vinalopó a los regantes murcianos. Así lo ha confirmado en Villena el propio Atanasio Molina, quien ha señalado que la oferta les fue remitida por carta, e incluso llegaron a ir a Yecla para intentar concertar una entrevista “a la que finalmente no acudieron”. Yendo aún más lejos, Molina ha señalado que el candidato socialista a las elecciones autonómicas murcianas, Pedro Saura, está “haciendo electoralismo en busca y captura de votos y ha llegado a decirnos que tendremos 40 hm3 al año procedentes del Júcar”, para concluir asegurando que “los regantes ya estamos hartos de demagogia y sandeces”.

A modo de conclusión, Molina ha recordado que el trasvase del Ebro era la mejor solución para el Altiplano, ya que estaba proyectado un ramal que dejaría 42 hm3 anuales. “Con su derogación, nos hemos quedado sin nada y nuestros acuíferos corren la misma suerte que los del Vinalopó”, ha concluido.

“Administración rastrera y engañosa”
Por su parte, Andrés Martínez ha recordado que los usuarios del Vinalopó, “que no entendemos de colores políticos, pactamos con la Administración una solución, y ahora la han cambiado completamente proponiéndonos una alternativa que, tras realizar los estudios pertinentes, vemos que es una verdadera aberración”. Por ello, y recordando que “nos enfrentamos a quien publica en el BOE”, Martínez ha calificado a la Administración como “rastrera y engañosa, aunque a nosotros no se nos puede engañar, por lo que vamos a seguir reivindicando, con rigor y seriedad, agua de calidad a un precio razonable, y también a recordar que el Júcar-Vinalopó es una solución parcial, la solución definitiva es el trasvase del Ebro”.

Además, Martínez ha señalado que “el Programa AGUA no es una solución ni para el Altiplano ni para el Vinalopó, porque es impensable bombear desde la costa hasta aquí el agua de las desaladoras”. Para concluir, y ante la posibilidad de que finalmente llegue el agua de Cullera y acabe siendo utilizada para baldear calles, Andrés Martínez ha señalado que “esa agua es veneno, y yo no sacaré a mis hijos a jugar a una calle baldeada con ella”, recordando que “la Ley dice que el máximo de coliformes que se permiten en el agua para baldear son 200 unidades, y hoy por hoy el agua de cullera tiene 4.800.000”.