Ayuntamiento y Junta Central organizan un nuevo curso gratuito sobre arcabucería y pólvora
Se trata de un requisito obligatorio para todas las personas que quieran disparar un arcabuz, ahora o en el futuro
Tras el éxito del año pasado, cuando tomaron parte en el mismo unas 300 personas, ayuntamiento y Junta Central reeditan el curso gratuito sobre el uso de armas de avancarga y pólvora, que tendrá lugar el próximo 25 de mayo en la Casa del Festero de 9 a 14 horas.
Pueden inscribirse en el mismo, a través de las comparsas y la Junta Central, todas las personas que lo deseen a partir de los 16 años, aunque no se pueda disparar hasta los 18, pues este certificado, obligatorio, no caduca. Y aunque no se sea arcabucero en la actualidad, se puede tener previsto para dentro de unos años, o presentarse para cargo en breve, por lo que se “trata de una buena oportunidad para recibir la formación necesaria en arcabucería, manipulación de la pólvora, medidas de seguridad, infracciones y sanciones que contempla la legislación”, explicaba la edil de Fiestas.
También es necesario poseer dicho curso para la figura del “porteador”, una persona “asociada al tirador y que puede recoger la pólvora en su nombre, para lo cual debe tener la misma formación básica sobre su manipulación y las medidas de seguridad necesarias”, añadía Luis Sirera, presidente de la Junta Central.
REPARTO EN EL CAMPO DE TIRO. La nueva legislación obliga a llevar a cabo varios cambios, que ya tendrán lugar el próximo 10 de mayo, de 12.30 a 14 horas, con motivo de la recogida de pólvora para dar la bienvenida a la Mahoma. De hecho, deja de celebrarse en el polideportivo y pasa al campo de tiro del Club de Tiro Olímpico de Villena (un camino que se toma a la derecha al llegar a la isleta de la carretera de Yecla donde giramos hacia Las Virtudes), debido a la distancia mínima de seguridad que hay que guardar frente a núcleos urbanos y vías de comunicación.
Además, los arcabuceros deberán entregar previamente sus cartucheras, adaptadas ya, con tapa antichispa y cierre de seguridad, a los delegados de arcabucería de sus comparsas. Será una empresa especializada la que cargue y precinte las cartucheras, garantizando la trazabilidad de la carga, y cuando el arcabucero o el porteador en el que haya delegado lleguen, no tendrá más que identificarse y recoger su cartuchera.
“Son normas aprobadas por el bien de todos”, concluía Sirera, “por lo que no tenemos más que asumir la situación con total normalidad y sin darnos cuenta nos habremos acostumbrado a la nueva ley”, concluía.