Celia Lledó: Mientras yo sea alcaldesa no vamos a consentir que nos traigan el agua del Azud de la Marquesa
Con los votos a favor de los integrantes del equipo de gobierno y los votos en contra de la oposición, el Pleno celebrado anoche aprobó la moción presentada por el Partido Popular para anular el acuerdo de Pleno anterior que convertía a Villena en usuaria de las aguas del trasvase Júcar-Vinalopó desde el Azud de la Marquesa.
La moción, largamente debatida, permitió que cada formación se enrocara en los argumentos tantas veces repetidos. La edil de Agricultura, Virtudes Amorós, definió el nuevo trazado del trasvase como insostenible económicamente e irracional, rechazó el agua por su mala calidad y recordó las palabras de Vicenta Tortosa, entonces alcaldesa, durante su visita a Cortes de Pallás, cuando afirmó que cambiar el trazado del trasvase supondría su muerte. Por su parte, el portavoz popular, José Joaquín Valiente, advirtió que corremos el riesgo de quedarnos en unos años sin agua para el consumo, afirmando que el trasvase desde Cullera no soluciona los problemas de Villena y recordando que el propio presidente de la Confederación Hidrográfica, Juan José Moragues, tildó al agua del bajo Júcar como verdadero veneno.
En los bancos de la oposición, Carlos Beltrán enarboló el apoyó de la Unión Europea al cambio de trazado, recordó que el trasvase desde Cortes no garantiza los 80 hm³ acordados y subrayó que debemos defender los intereses de Villena, no los de la costa, los constructores y la especulación. Asimismo, recordó que Villena tiene garantizado su consumo y el de sus regantes, subrayando que lo verdaderamente importante es acabar con la sobreexplotación de los acuíferos. Por su parte, Francisco Javier Esquembre definió la situación de los acuíferos como insostenible y aseguró que la moción popular no la resuelve, acusando al PP de repetir el error de experiencias cercanas como el trasvase Tajo-Segura, que no ha hecho más que incrementar la demanda muchísimo más que la oferta. Asimismo, Esquembre se cuestionó qué hacemos defendiendo en Villena los intereses de la Marina Baja, apostó por la desalación para solucionar los problemas de abastecimiento en el litoral y abogó por obtener la declaración oficial de sobreexplotados para nuestros acuíferos, paso previo para proceder al cierre de los pozos.
La alcaldesa sentencia
Finalmente, tras réplicas y contrarréplicas que no hacían más que ahondar en los argumentos de siempre, tomó la palabra la alcaldesa, Celia Lledó, quien insistió en la situación de sobreexplotación de los acuíferos. Tras defender el derecho de todos al desarrollo y el crecimiento, la alcaldesa apostó por garantizar dicho progreso, para lo que es necesario contar con agua de calidad. Para concluir, y tras mostrar una fotografía de una reciente mortandad masiva de peces en el bajo Júcar, Lledó aseguró que mientras yo sea alcaldesa no vamos a consentir que traigan esa agua.
