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Centro Deportivo Villena: una concesión que hace aguas (I)

El Centro Deportivo Villena, es decir, la “piscina cubierta municipal”, cerró su primer ejercicio con un déficit de 615.000 euros, cantidad que debe cubrir el ayuntamiento para mantener el equilibrio económico de la concesión, según obliga el contrato entre el consistorio y la Unión Temporal de Empresas (UTE) que construyó y gestiona dichas instalaciones. No obstante, los nuevos presupuestos municipales solo contemplan un pago de 220.000 euros en 2013, lo que ha desatado la indignación de Ingeniería del Agua (IA), empresa villenense que conforma la UTE junto a la multinacional Fomento de Construcciones y Contratas (FCC).
Por ello Rafael Merín, gerente de Ingeniería del Agua, quiere dar a conocer a través de El Periódico de Villena cuál es su versión del problema y lo que esta concesión va a suponer para los villeneros, pues, a la vista del presupuesto, “el ayuntamiento está incumpliendo el contrato de concesión”. “Durante 4 años hemos cumplido escrupulosamente lo que nos pidieron: construimos lo demandado haciendo la inversión correspondiente y pasando todos los trámites; llevamos más de un año de explotación, y ahora, cuando el ayuntamiento debe cumplir su parte, corrigiendo un desequilibrio económico auditado y presentado en tiempo y forma, dicen que no”.

Según Merín, “el ayuntamiento ha aceptado el desequilibrio de 615.000 euros, pero quieren negociar, lo cual es lógico, dentro de un orden, en las circunstancias económicas actuales”. El problema viene “cuando compruebas que este proyecto ha sido politizado y será siempre usado como un arma arrojadiza”.

“¿No pueden o no quieren pagar?”
La primera pregunta que nos hacemos, afirma Merín, es si el ayuntamiento “no puede o no quiere pagar”, y cuando en una reunión con miembros del equipo de gobierno David Molina, concejal de Hacienda, te dice que “no te paga porque otros gastos le generan un mayor rédito político” te indignas, “sobre todo cuando tú has cumplido tu parte y el incumplimiento del otro te genera problemas, ya no a nuestra empresa, sino a aquellas empresas y trabajadores a los que nosotros debemos dinero por este proyecto”.

Para FCC, 400.000 euros más o menos “no supone casi nada; para nosotros es estar en el filo o quebrar. De hecho, hemos presentado el pre-concurso de acreedores, porque la única vía de atender nuestros compromisos es que el ayuntamiento pague lo que debe”. “Nosotros no tenemos afiliación política, somos empresarios, pero están llevando a nuestra empresa a la ruina, y lo único que nos queda es dar nuestra versión de lo que está pasando y que la gente lo conozca”.

“El equipo de gobierno quiere que la piscina fracase”
Desde junio de 2012, continúa Merín, “reclamo al ayuntamiento que modifique tarifas y horarios, y no quieren hacerlo. El año pasado hubo un desequilibrio de más de 600.000 euros. Y si no se ha cambiado nada, ¿esperan ahora un resultado diferente?” –de hecho, y siendo “optimista”, Merín espera un desequilibrio de 700.000 euros para este ejercicio–. Es evidente, prosigue, “que las condiciones actuales no son las mismas que cuando este proyecto se planteó –crisis, subida del IVA–. Por eso se le presentó el ayuntamiento una alternativa de tarifas y horarios, nos pidió que lo aclarásemos y lo hicimos en una segunda reunión, y después de tres meses analizándola solo aprueban la subida del IPC, porque según sus informes técnicos nuestra propuesta no es viable”. “¿Dónde están esos informes? ¿Dónde están las alternativas que ofrecen a nuestras propuestas? No hay nada. Si los técnicos dicen que no se puede, que nos den esos estudios para analizarlos, rebatirlos o corregir nuestra propuesta, pero no nos dan nada. Si ese informe existe, que nos lo den, y si no existe, ellos sabrán por qué están actuando así. Es más, tampoco han aceptado las propuestas para modificar las tarifas de la temporada 2013/2014”.

“¿Insinúa que el equipo de gobierno pretende que fracase la piscina”, pregunta el redactor. “Básicamente”, responde Merín, que se explica recordando la polémica por el transformador eléctrico: “No estaba incluido en el proyecto, como reconocen los propios técnicos municipales, por lo que el ayuntamiento tuvo que garantizar ante Conselleria, que daba una subvención para la obra, que esa parcela tendría electricidad. Una buen gestión del ingeniero municipal hizo que el coste de llevar la línea lo asumiera Iberdrola, por lo que el ayuntamiento solo tenía que pagar 4.000 euros de derechos de enganche, pero llegaron las elecciones, cambió el gobierno y empezó el problema político”.

“Nos dijeron –continúa Merín– que no tenían partida para pagar el enganche, y nos pidieron hacerlo a nosotros con el compromiso de devolverlo, cosa que no han hecho ni en 2012 ni en 2013… Entonces nos reunimos con el alcalde, y como gesto de buena voluntad, dado que Los Verdes habían hecho en la oposición caballo de batalla de la depuración con ozono en vez de cloro, propusimos cambiar el sistema de depuración asumiendo nosotros el coste. ¿Qué dijo el alcalde? Que no. Olvidando sus reivindicaciones en la oposición para sacar rédito político prefirió, literalmente, ‘hacer sangre con el tema del transformador’. En resumen, sintetiza Merín, “primero retrasan el asunto todo lo que pueden, después no toman medida alguna para corregir el déficit, y por último llegan los acuerdos entre el ayuntamiento y nuestros socios de FCC”.

Una UTE muy poco unida
“IA participa en la UTE con un 20%, mientras que FCC controla el 80%, además de tener otros intereses en Villena como la planta solar o la contrata del agua potable”. Tras añadir este dato, Merín prosigue: “En el Pleno de enero de 2012 se da vía libre a la valoración de las obras y el Plan Económico Financiero de la piscina, y casualmente, en ese mismo Pleno, es adjudicado el servicio de agua a FCC a través de su filial Aqualia. ¿Más casualidades? Recientemente FCC acepta pagar los 4,8 millones de ICIO por la planta solar con un acuerdo por el que les condonan más de 4,5 millones por la licencia, y dos semanas después se aprueba el presupuesto, en el que en lugar de pagar los 615.000 euros por el equilibrio financiero se pagan 220.000. ¿A cambio de qué? ¿Es este el mismo FCC que ha pleiteado 8 años con Villena por el agua? ¿Ahora aplazan ese pago a cambio de nada?”.

“El tema está claro: ayuntamiento y FCC han hecho un paquete (se han reunido en Alcaldía todas las partes –piscina, planta solar, agua–) y negocian cosas para sí (en beneficio de la planta solar o la contrata del agua) sacrificando cosas que afectan a la UTE, y por lo tanto, a IA, que se ha quedado vendida entre los intereses políticos del Ayuntamiento y el interés económico de Fomento, lo que nos puede llevar a tener que malvender la participación de nuestra empresa en la UTE o a que se la quede un banco. Nuestro socio negocia un dinero, que en parte es nuestro, perjudicándonos, y el equipo de gobierno hace política en beneficio propio con el dinero de todos los villeneros”.

[Continuará]

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