Cerdán tilda las ‘excusas’ de Esquembre sobre la pérdida de otra subvención como ‘un insulto a la inteligencia’
El secretario general del PSOE, Fulgencio Cerdán, ha respondido a las declaraciones de la edil de Desarrollo Económico, Esther Esquembre, sobre la pérdida de una nueva subvención valorada en 400.000 euros para un taller de empleo, tildando sus excusas de tomadura de pelo e insulto a la inteligencia de alguien que se debe pensar que los ciudadanos de Villena son tontos.
Respecto a la ausencia de preguntas del PSOE para ver qué ha sucedido antes de salir a los medios, Cerdán señalaba que nuestras fuentes son los datos del Servef, 100% fiables y accesibles a través de su web, porque es una institución transparente, no como el ayuntamiento de Villena. Además, y dado que la edil verde comparó las ayudas con una lotería, que te presentas y unas veces toca y otras no, Cerdán calificaba de vergonzosa y lamentable esta forma de proceder, pues un responsable político debe tener un proyecto, priorizar sus necesidades y concurrir con todas las garantías a la ayuda que entienda que mejor se adapte a su plan, algo aún peor cuando está en juego dinero público y hay de por medio familias cuyos únicos ingresos eran los 700 euros de este taller de empleo. Esther Esquembre está totalmente desautorizada para ser concejal, porque la única lotería que existe es el trabajo diario, aunque parece que algunos quieran cambiar el girasol de su logo por el trébol de 4 hojas a ver si les da suerte.
No hay recurso
En cuanto a las reclamaciones interpuestas por el ayuntamiento ante el Servef, que Esquembre esgrimía para desacreditar las palabras de Cerdán, el edil socialista tiraba de hemeroteca para demostrar que en todo momento me referí a un contencioso ante los tribunales que Esther Esquembre anunció el 28 de marzo. Desde el 1 de marzo, decía Cerdán, el PSOE sabía que Villena había quedado fuera, y a partir del día 14 de manera definitiva. Sin embargo no dijimos nada, porque había trabajadores implicados y pensábamos que lo haría la concejal, pero no lo hizo, sino que lo ocultó, y por eso salimos ante los medios el día 26 de marzo, y qué casualidad que ese mismo día es cuando Esquembre hace su queja al Servef, para anunciar dos días después que llegará hasta los tribunales si es necesario, algo que a día de hoy no ha hecho, por lo que nos queda es humo, una pataleta para justificarse ante la ciudadanía de una señora que es tremenda, porque está criticando al Servef por ajustarse a las reglas del juego y no a los chanchulleos y tejemanejes de Esther Esquembre.
Además, Cerdán acusaba a Los Verdes de desdecirse respecto al recurso contra el Servef, recordando que el Conseller responsable es de Compromís e insinuando que tal vez los Verdes no sean ni tan autónomos ni tan localistas, y han preferido no hacer ruido contra los suyos no sea que Mónica Oltra no les meta en las próximas listas, igual que pasa con la planta de Vaersa, donde la inversión es nula pero nuestro alcalde sigue callado como siempre.
Villena, la peor
Asimismo, Cerdán hacía una comparativa (pueden conocerla en el archivo Excel adjunto) entre Villena y varias ciudades de nuestro entorno (Salinas, más pequeña; Petrer, de igual tamaño; y Elda, más grande) que demuestra que todas ellas reciben más fondos que Villena, aún aspirando a menos talleres y subvenciones, porque tienen claro qué quieren y saben cómo conseguirlo. Esto no depende ni del color político del ayuntamiento ni del tamaño de las poblaciones ni es una lotería
es simplemente trabajo, decía, aprovechando para recordar a Esther Esquembre que no se felicite tanto por su trabajo en Desarrollo Económico, que bajo su mandato han desaparecido Artefiesta o Vinouvelle.
Por último, y ante las acusaciones al PSOE de bloquear la aprobación del Plan de Igualdad, que daría a Villena más puntos en estas convocatorias, Cerdán le recordaba a Esquembre que esto es una cuestión de matemáticas de 1º de Primaria: 11 concejales Verdes son más que 10 de la oposición, y si no han aprobado ese plan con su mayoría, como hacen con tantas otras cosas, es porque no han querido, que no venga ahora a culparnos a nosotros de que algunos de sus compañeros no se crean el Plan y lo estén modificando, concluía.