Colocada, y atacada ya por los vándalos, la barandilla que permitirá abrir al tráfico Luciano López Ferrer
La semana pasada se procedió a la colocación de una valla para proteger a los peatones en el tramo de la calle Luciano López Ferrer ante su inminente reapertura al tráfico. El edil de Obras, Juan Richart, ha recordado que con esta barandilla se separará el tráfico de vehículos del parque contiguo que hay en la explanada del Teatro Chapí, garantizando la seguridad de los peatones, especialmente de los más pequeños.
Ahora todo depende de la concejalía de Tráfico y del informe de la Policía Local que debe hacer la señalización correspondiente antes de su apertura. Richart ha comentado que están negociando con la empresa que ha colocado la valla para que la barandilla tenga el mínimo coste posible. Cerca de 9.000 euros fue el precio que adelantó hace unas semanas el concejal, que hoy informaba de que el ayuntamiento pretende llegar a un acuerdo con la empresa, que también ofrece otros servicios, para compensar el pago de la valla con otros beneficios.
La valla ya presenta desperfectos
Esta mañana ya eran visibles algunos desperfectos en la barandilla, provocados posiblemente por gamberros que subiéndose sobre su barra inferior han querido comprobar su resistencia. Como se observa, a lo largo de la valla el diseño es plano pero en numerosos tramos se hace visible que alguien ha forzado la última barra, curvándola.
El cierre y la apertura al tráfico de este tramo ha sido un punto polémico tanto en la anterior como en la actual legislatura. Los tres partidos de la coalición se comprometieron a la reapertura de la calle, pero el Partido Popular y algunos colectivos de vecinos han mostrado su oposición ante esta decisión.