Comunicado del Grupo de Arcabuceros de la Comparsa de Andaluces

El motivo que nos lleva a escribir estas líneas, no es otro que el de informar a los vecinos de Villena, que nos han ido preguntando estas últimas semanas y a todos en general sobre nuestra negativa a participar en los actos de arcabucería en las fiestas de este año. La problemática de la pólvora no es nada nueva, ya viene de años atrás. Las leyes que rigen el consumo de la pólvora, y por consiguiente a los arcabuceros, cada vez son más estrictas pero, a su vez, dejan algunas lagunas que cada uno interpreta a su manera, pero nadie se decide a profundizar sobre ellas.
Una de esas lagunas es el almacenamiento de la pólvora

Mucha gente piensa, sobre todo al ver las grandes medidas de seguridad con que se transporta y reparte la pólvora, que el problema es tan sólo el traslado hasta Villena: camión blindado y escoltado por la Guardia Civil, reparto de un solo kilo por cada arcabucero, etc. Pero realmente cuando se ha repartido la pólvora, y ya esta en nuestro poder, es cuando empieza el problema.

Hace un mes escaso se nos comunicó, por parte de la directiva de nuestra Comparsa de Andaluces, que debido al riesgo que supone para todos los socios de la misma, este año la pólvora no se almacenaría como habitualmente se venia haciendo en nuestra sede social. Decisión esta compartida y aprobada por todos los socios presentes en la Junta General del día 15 de agosto. Ante esta nueva situación para nosotros los arcabuceros, el tema estaba claro: debíamos almacenar la pólvora nosotros en nuestras casas, como suponemos harán tantos otros arcabuceros de Villena.

En este mismo periódico, se comentó hace breves días por la Junta Central de Fiestas, que los arcabuceros de la Comparsa de Andaluces no habíamos querido asumir el riesgo de la posesión de la pólvora en nuestras casas. Es todo lo contrario, el arcabucero contrabandista, como el de cualquier otra comparsa, ha decidido serlo libremente y, por consiguiente, está expuesto a una serie de riesgos hacia su persona, por todos conocidos, y es responsable de cada uno de sus actos ante su comparsa y, por supuesto, ante la Junta Central de Fiestas.

Pero por ser arcabuceros no estamos en posesión del derecho a poner en riesgo la vida de nuestras familias y, por supuesto, aún menos las de nuestros vecinos, almacenando tan peligroso elemento en nuestras casas, pisos, etc.

Si hacemos un poco de historia, por todos es sabido que los inicios de nuestras amadas fiestas empezaron con las salvas de arcabucería que hacía la soldadesca hacia nuestra patrona, la Virgen de las Virtudes. Pues bien, desde entonces y hasta ahora, como se suele decir ha llovido mucho, y lo que antes era una cosa normal, como el almacenar cada arcabucero en su casa la pólvora, en la actualidad es un riesgo innecesario que nadie deberíamos correr.

Antaño, ante cualquier accidente fuera de la índole que fuera, se decía siempre: “mira, cosas que pasan”, “qué le vamos a hacer”. Hoy en día no es así, ante cualquier accidente siempre el agredido pide que recaiga todo el peso de la ley sobre el agresor, por no hablar de las cantidades millonarias que se piden en los juzgados por daños a terceros, responsabilidad civil, etc. Ante esta problemática tan evidente para todos, nosotros, el Grupo de Arcabuceros de la Comparsa de Andaluces, decidimos por unanimidad que tampoco queríamos almacenar la pólvora en nuestras casas.

El arcabucero está asegurado por la Junta Central de Fiestas ante cualquier accidente que pueda suceder en el transcurso de los actos de arcabucería, pero la tenencia de explosivos en una vivienda no está cubierta por los seguros que tenemos a nivel doméstico.

Desde aquí, este colectivo de arcabuceros de la Comparsa de Andaluces quiere dejar claro que ante la imposibilidad de poder disparar en las presentes fiestas, los más perjudicados somos nosotros, al vernos privados de esa parte de la fiesta que tanto nos gusta. Sabemos que pasaremos a la historia como la comparsa que no disparó en las fiestas de 2006, pero si con ello logramos que se tomen las medidas necesarias para que nunca tengamos que lamentarnos de una desgracia, nos daremos por satisfechos.

Sabemos que hay varias alternativas a este problema, que se están empezando a estudiar, como son la construcción de un polvorín a las afueras de Villena y varios polvorines móviles. Otra posible solución sería, como ya se hace en otras poblaciones cercanas, que se efectúe un reparto diario, consumiendo así la pólvora necesaria para ese acto en concreto. Deseamos que, tanto la Junta Central de Fiestas como el M.I. Ayuntamiento de Villena, aúnen esfuerzos para dar solución a tan importante asunto.

Esperando que todos los actos de arcabucería discurran con normalidad y sin ningún incidente, se despide este grupo de arcabuceros pertenecientes a la Comparsa de Andaluces, no sin antes desear a todos los villeneros, y a cuantos visitantes nos acompañen en estos días, unas FELICES FIESTAS.

Grupo de Arcabuceros de la Comparsa de Andaluces