Cristalería Soler ultima el cerramiento de cristal que cubrirá la plaza de toros
La alcaldesa de Villena, Celia Lledó, y la edil de Patrimonio, Mª José Hernández, visitaban esta mañana las instalaciones de la empresa local Cristalería Soler que está fabricando las placas triangulares que formarán la cúpula acristalada que permitirá cerrar el techo de la Plaza de Toros una vez el edificio esté restaurado y en funcionamiento.
La primera edil se mostraba gratamente sorprendida por el cariño y el mimo que ponen durante el proceso de fabricación, así como el complejo tratamiento que lleva conseguir un cristal con todos los estándares de calidad y seguridad. Asimismo deseaba que proyectos de gran inversión como el de la plaza de toros sirvan para que las empresas de la ciudad sigan manteniendo sus puestos de trabajo. Según Lledó es un lujo poder tener en Villena una industria como ésta.
Por su parte Ramón Soler, uno de los tres hermanos propietarios de la firma, aseguraba que para Cristalería Soler es un orgullo poder trabajar en una obra tan emblemática para la ciudad. Afirmaba que son la empresa de la Comunidad Valenciana más preparada para este tipo de trabajos, por su tecnología y equipamiento. En este sentido recordaba proyectos ya realizados como el aeropuerto de Kuwait o el nuevo Hospital de la Fe (Valencia) y otros en proceso, como una nueva sede del Museo Louvre de Paris. Y por esta trayectoria de grandes proyectos, la empresa ha puesto todo su empeño para conseguir la obra de la Plaza de Toros de Villena, añadía.
Como curiosidad señalaba que el 90% de las piezas de la cubierta son diferentes, por el diseño del techo, lo que obliga a trabajar una por una, para darles la dimensión e inclinación que permitan formar el círculo y la bóveda. Cada triángulo de cristal pesa entre 230 y 240 kilogramos y tiene un espesor de 3,8 cm. En total se van a elaborar unas 560 unidades para conformar la cúpula.
Respecto a las características del cristal indicaba que es un vidrio con factor solar del 50%, transmisión luminosa del 47%, con resistencia mecánica en la parte exterior e interior. El exterior se compone de un vidrio templado con capas de titanio, acero inoxidable, plata y sílice, que permiten reflectar el calor del sol hacia fuera mientras se mantiene la temperatura dentro del inmueble. Pero en un momento dado el cristal exterior podría romperse y desprender fragmentos, por eso la parte interior es un vidrio de seguridad laminado, que evitaría que el cristal cayera al vacío de la plaza.
El proceso de producción en la factoría va a durar en torno a 50 días. En este momento la nave de grandes proyectos de Cristalería Soler está dedicada al 60% en la fabricación de los cristales para la cubierta. Pero la empresa espera que el trabajo no se quede ahí, pues está negociando con la adjudicataria de la obra para realizar también el acristalamiento de la pirámide anexa, así como la pasarela, las ventanas y el resto de cristales de la Plaza de Toros. El coste total de las placas para el techo de la plaza de tornos se ha situado entre los 300.000 y 400.000 euros.