Para "Fuego de virutas" no pretendíamos la memoria, pero ahora que en El Túnel, Santiago Hernández Reig Santi ha montado una exposición sobre grupos musicales en Villena, la memoria se entretiene en aquellos tiempos que para muchos de nosotros fueron de muchas ilusiones ligadas a la música. Santi Villena cuéntame centrifuga la memoria y la colectiviza. No está mal contra el olvido. No está mal para reprocharnos silencios demasiado dilatados en el tiempo.
La muestra deja un sabor agridulce; una sensación, respecto a la música y Villena, como llamémosle así de maleficio de Chapí. Maleficio de Chapí, porque pese a lo que con preciso criterio ha escrito Vicente Prats al respecto, matizando históricamente las distancias del "xiquet de Villena" con Villena, parece que Villena no ha sido/no es generosa con sus músicos. ¿Villena sorda? La exposición y lo que Santi trabaja de futuro reparará mucha deuda.
Todo nos pilla preparando un concierto con Pepe Cabanes que será, D.m., para después del verano y donde se dará cuenta de variedad y gustos. Poco hemos escrito de nuestra experiencia musical. Sí en una autobiografía para la web de la Asociación Cultural Orihuela 2m10 donde homenajeábamos como maestros a Lola Campos y a Luis Hernández y recordábamos a los compañeros de fatigas. De la época de Tabique, que es lo que se evoca en la exposición, ahí tenemos escrito: "Nuestra música era o quería ser mezcla de rock sinfónico y rock urbano. Algo así híbrido entre lo que hacían los grupos de entonces Bloque y Asfalto. Ahora que escribo Bloque y Asfalto veo con gracia que nuestro grupo se llamara Tabique. No nos fue mal la experiencia y hasta llegamos a actuar de teloneros con los alicantinos de Mediterráneo, y con Cucharada el grupo que tenía Manolo Tena y hasta con Leño, la actuación que más nos satisfizo. Pero la necesidad de la pachanga para pagar las deudas nos agotó y nos despistó. El verano de "Los Pajaritos" consumió nuestra resignación y nuestra paciencia. Y finalmente deshicimos el grupo. No la amistad que aún sigue entre los componentes: Antonio Casanova Capablanca (guitarra), José Francisco López (batería), Miguel Mira Estevan (guitarra), Pedro Hernández Valdés (bajo y voz) y un servidor (teclados y voz). Durante una época formó parte del grupo Juan Antonio Fructuoso (guitarra y voz). Antonio Casanova le sustituyó."
Y refiriendo lo más reciente: "En los últimos años he matado el gusanillo de la música con la música folk. Aquí nació Manteca Colorá que dio para algunas actuaciones divertidas y entrañables en la Casa de la Cultura de Villena. La iniciativa partió de Pepe Cabanes. A Pepe Cabanes y a su amigo Primitivo les había acompañado con el piano en alguna ocasión. De ahí la amistad. En Manteca Colorá estábamos Pepe Cabanes, Primi, Dióscoro Torres, Toni Molina, Toni Prats, Miguel Mira, Antonio Casanova y un servidor.
Ahora saco algo de tiempo para tocar el piano. Mero juego para no perder los dedos y mero entretenimiento relajante. Y también saco algo de tiempo para acompañar con el piano o con la guitarra a mi hija Teresa que ha traído a nuestra casa la voz cálida del violonchelo. Me gustaría que no se cansara. El aprendizaje musical exige mucho tiempo. Espero que no se canse porque [...] la música me hace feliz."
Y en todo esto de música y músicos que no se nos olvide nunca la labor de Francisco Mira Estevan Paco Mira que tanto hizo por el pop-rock en la ciudad. Hemos leído algún foro firmado por Dióscoro Torres homenajeando a Paco. Honra que honra a Paco Mira, honra que honra a Dióscoro.
