De mentira en mentira y miento porque me toca
¿A qué se debe esa imperiosa necesidad de mentir que tiene el actual gobierno de nuestra ciudad? Llevo pensándolo varios días, y me cuesta llegar a conclusiones que se alejen de que sea debido a la mera ignorancia, al fanatismo o la creencia de que todos somos cabezas de un ganado sin cerebro que va a creérselo todo. Últimamente nos están dando muchísimas muestras de su obsesión por la mentira, pero las relacionadas con la inauguración del centro de mayores de la UDP se han llevado la palma.
Para empezar, y como nota meramente anecdótica, pero que refleja lo enfermizo de su comportamiento, cabe destacar la nota que el gabinete de comunicación de la alcaldesa mandó a los medios de comunicación tras la inauguración. Más de 3.000 personas se dieron cita proclamaba a gritos el panfleto. ¿De verdad creen que los villeneros no tenemos ojos en la cara? ¿Qué no vemos las fotos adjuntadas por algunos medios en las que se veía la plaza Mayor desde un balcón? ¿Qué necesidad tiene de mentir sobre la asistencia a una inauguración que debería de ser noticia sólo por lo que significa la edificación de dicha infraestructura? Sinceramente, como ciudadana, lo mismo que me da que asistiesen 3.000 como 300, porque lo importante es el hecho de su edificación.
Pero lo más grave no ha sido esa mentira fanática, que sólo intenta ensalzar la grandeza del régimen haciendo ver a los demás que miles de seguidores aclamaban a la emperatriz. Lo más grave ha sido la mentira que precedía a la inauguración.
En mi familia, como en todas las de Villena, los miembros jubilados de la misma han recibido un folleto publicitario en el que se les ofrece como regalo el centro rehabilitado. Todos hemos pensado que dicho centro, al ser regalado a todos los jubilados, podrá ser utilizado por los mismos cuando deseen dedicar algún momento al ocio. Pero parece ser que no.
La Unión Democrática de Pensionistas, para la que se rehabilitó la nueva sede, ocupará el edificio. Y, como todas las asociaciones de esta índole, tiene socios que pagan religiosamente unas cuotas para disfrutar de todas las ventajas que da la asociación. Entonces, ¿qué ocurrirá con los jubilados que no son de la UDP y que acudan al centro invitados por la señora alcaldesa? ¿Serán acogidos por los miembros de la UDP a pesar de que no paguen cuotas? ¿Serán expulsados debido a que no son socios de dicha asociación? ¿Qué necesidad tenía equipo de gobierno de mentir y complicar así lo que debía de haber sido una buena noticia?
Sigo dándole vueltas porque no consigo entender que la necesidad de atraer votos le lleve a complicarse tanto la existencia. Mentir por mentir acaba siendo peligroso, y en consistorio villenense hace ya mucho que pocas verdades se dicen.