Este sábado se pudo disfrutar de un intenso partido de fútbol en La Solana: el Sporting Villena recibía al líder, el Rayo Ibense. Los tres puntos en juego eran de vital importancia para ambos conjuntos; los locales para asegurar de forma casi matemática su continuidad en Primera Regional y los visitantes para certificar su primer puesto en la tabla y el consiguiente ascenso a Preferente.
El encuentro comenzó con ambos conjuntos bien posicionados en campo propio con las líneas muy juntas, lo que propiciaba balones al espacio para llegar arriba. Sin grandes ocasiones de gol por ambos conjuntos se produjo el primer traspié para el City. Corría el minuto 8 de juego cuando el conjunto ibense se adelantaba en el marcador al rematar un saque de esquina. Una vez más el Sporting Villena encajaba un gol a balón parado en los primeros minutos. Tras el gol los visitantes endurecieron su juego en la medular del campo en la que cada balón dividido era disputado como si fuese el último. Ante la imposibilidad de combinar con fluidez y triangular en el centro del campo, ambos bandos optaron por el balón directo para pisar el área rival. Al Sporting le costaba perforar la tupida defensa visitante e inquietar los dominios de su arquero.
En el minuto 22 iba a llegar el segundo tanto rayista. La jugada nace de un balón parado a favor de los azulones que es despejado por la zaga y que permitió crear un contragolpe. La rápida jugada visitante cogió en inferioridad numérica a la defensa sportinguista y tras la parada inicial de Jorge el balón cayó a los pies del delantero, quien en posición antirreglamentaria, anotaba a placer. La jugada fue muy protestada por los jugadores villenenses pero el tanto finalmente subió al marcador.
Los visitantes se encontraban muy cómodos defendiendo su renta en el marcador defendiendo con una intensidad que rozaba lo violento. El Sporting nunca le perdió la cara al partido y se puso el mono de trabajo ante un partido muy muy duro que el trencilla no supo encauzar con astucia. En el minuto 36 el árbitro señaló penalti a favor del City. Fue tras un gran pase de Jorge desde el centro del campo hacia Bati, cuando el atacante villenense recibió el balón fue arrollado por su marcador. El árbitro señaló los once metros y expulsó a su defensa central al mostrarle la segunda cartulina amarilla. Batiste asumió la responsabilidad del lanzamiento y anotó el 1-2 con un tiro ajustado al palo. Con este resultado se llegaba al final de la primera mitad.
Jarro de agua fría
El segundo acto comenzó con un cambio en el ataque del Sporting Villena. Javi dejaba el terreno de juego con un fuerte golpe en el tobillo y su lugar lo ocupaba Andrés. Los de Toni Ribera salieron inflados de moral tras el gol y con la intención de dar la vuelta al electrónico. Poco duraría la alegría a los citizens cuando en el minuto 53 anotaba de nuevo el Rayo. Fue de nuevo a la salida de un córner en el que Jorge Navarro en su intención de despejarlo desvió el cuero hacia su propia portería. Un jarro de agua fría que dejó helada a la grada y desató la locura en el banquillo ibense. Toni acto seguido realizó un cambio para meter más pólvora en ataque, López dejaba el terreno de juego por Rooney. El mediapunta villenense no pudo desarrollar todo su juego con un fútbol tan directo. En el minuto 59 se produjo la primera tangana con un jugador visitante al ser sustituido quien se dirigió hacia el público con malos modos.
El partido se había descarrilado y cada balón dividido era una verdadera batalla por la posesión del mismo. En el minuto 60 era expulsado el entrenador visitante por sus airadas protestas contra el colegiado. El dirigente ibense perdió por completo los papeles montando en cólera y al ser invitado a abandonar el campo fingió una agresión dejándose caer por las escaleras del túnel de vestuarios. El delegado de campo sportinguista, ante su asombro, avisó al árbitro de la acción y éste procedió a suspender temporalmente el partido hasta que llegasen las fuerzas del orden. En el estadio nadie entendía nada y los propios jugadores ibenses se avergonzaban del lamentable espectáculo que estaba ofreciendo su entrenador.
Unos minutos más tarde y con la presencia de la Guardia Civil en el estadio se reanudó el choque. En ese momento se produjo un cambio Fortiz dejó su sitio en el campo a Gómez y Jorge retrasó su posición para terminar como central junto a Paco. El encuentro no perdió en intensidad tras su reanudación, aunque sí vistosidad, pues los locales con 1-3 en el marcador y un hombre menos se dedicaron a perder tiempo durante toda la segunda mitad. En el minuto 72 Toni realizó su última sustitución en busca del empate. Retiró del campo a Adri y en su lugar metió a Moltó para intentar abrir más el campo. Cinco minutos después iba a llegar el segundo tanto para los azulones. Fue tras un balón colgado al área en el que Bati se anticipó a su marca y batió de cabeza la portería rayista.
Sin señorío
Todavía quedaban quince minutos de juego y el empate parecía más cerca que nunca. Los visitantes demostraron su oficio y experiencia en la categoría con múltiples pérdidas de tiempo que ensuciaban un gran partido de poder a poder entre dos aguerridos equipos. A punto estuvo Moltó de hacer el empate. El extremo villenense lanzó una falta directa que tras superar la barrera fue atajada por el guardameta visitante. A falta de cinco minutos para el final el segundo entrenador del Rayo Ibense fue también expulsado al increpar al árbitro desde el baquillo y dos minutos después Santa dejaría a su equipo con diez jugadores también al ver la tarjeta roja por dejar la pierna tras un choque en el centro del campo.
Al final 2-3 para el Rayo Ibense, quien durante los primeros minutos del encuentro demostró que se trata de un gran bloque que el próximo año jugará en Preferente. Desde que anotó el 0-2 apenas vimos nada de un equipo que con sus actos no demostró el señorío que se le presume al líder de la categoría.
Alineación titular: Jorge Redondo, David Mas, Fortiz, Paco, David Navarro, Jorge, Santa, López, Adri, Bati y Javi.
El Crack: Batiste; su partido fue excelso. Batalló con toda la defensa rival a quien llevó de cráneo con su poderío aéreo. Se hinchó a hacer kilómetros, fue el primer defensa del equipo en la presión y además anotó los dos goles de su equipo. Una gran noticia la recuperación total de Batiste para las últimas jornadas del campeonato.
El Dandy: David Navarro; fue un pulmón por su banda izquierda, no concedió ocasiones por su costado y siempre que pudo se incorporó al ataque. Gran partido el suyo que contagió su mentalidad ganadora en un partido para hombres.
¡Vaya día! : En esta ocasión el vaya día es para el entrenador del Rayo Ibense, tras su expulsión por protestar fingió una agresión al dejarse caer por las escaleras. Una imagen surrealista que empaña la imagen de un buen conjunto de fútbol que no merece ese entrenador.
