El Sporting Villena estrenaba a Toni Ribera en el banquillo blanquiazul, que no consiguió espantar el gafe que arrastra este equipo. Corría el minuto 2 de juego cuando se produjo la primera llegada local al área sportinguista. El balón terminó en corner y éste en gol tras un grandísimo testarazo desde la frontal del área. El equipo, una vez más, veía cómo se le adelantaban en los primeros compases del encuentro.
Pese a las numerosas bajas que arrastraba el equipo y con una defensa inédita con Andrés como lateral y Santa en el eje de la defensa, el City quiso hacerse con el control del partido. Era necesario triangular en corto y a gran velocidad pues las reducidas dimensiones del terreno de juego facilitaban la presión y obligaban al juego directo.
La banda izquierda monopolizaba la mayoría de ataques citizens con Carlos y Perry especialmente activos. Desde allí nació una oportunidad que a punto estuvo de convertirse en el empate. Carlos desbordó en velocidad y puso un balón al corazón del área donde Batiste, con un acrobático remate de escorzo, a punto estuvo de igualar la contienda.
El Sporting Villena pisaba más el área visitante, aunque sin grandes ocasiones de gol. El conjunto local aprovechaba su ventaja en el marcador sin correr riesgos en defensa y con balones largos buscando la velocidad de sus delanteros. En uno de esos balones largos iba a llegar el segundo tanto del encuentro: centro al área desde la izquierda en el que el delantero se anticipa a su marca y bate de cabeza a Jorge. Era la segunda llegada a portería del conjunto chellino, que contaba sus ocasiones por goles en la primera mitad.
La segunda parte comenzó con un guión similar. El City buscaba tener el control del balón para generar espacios en la tupida defensa local, mientras el Chella abusaba del balón en largo y la velocidad para llegar arriba. Fue un partido muy intenso en el que los locales rozaban la ilegalidad del reglamento en cada una de sus duras acciones. Merced a dicha intensidad iba a ser expulsado Andrés. El reconvertido lateral derecho veía la segunda cartulina en un choque del partido y dejaba a su equipo con diez jugadores sobre el césped.
En el minuto 65 se produjo la única sustitución en el conjunto villenense. Abandonaba el partido López y en su lugar entraba Gómez. Jordi volvía al equipo tras un mes de ausencia y dejó detalles de su enorme calidad durante la hora de partido que estuvo sobre el campo. Poco después Bati perdonó la ocasión más clara del partido. El delantero sportinguista remató al centro un buen pase de Carlitos en el corazón del área.
Los de Ribera siguieron intentándolo y con diez jugadores sobre el césped practicaron los mejores minutos de fútbol. El Chella CF no elaboraba en el centro del campo y esperaba errores o recuperaciones en campo propio para montar contragolpes desesperados. Jorge apenas recibió ocasiones manifiestas de gol en inferioridad numérica.
Sin embargo este equipo no está afortunado en los últimos encuentros y la siguiente aproximación local se tradujo en el 3-0. Balón en largo del portero que se traga la defensa villenense y es aprovechado por el delantero local para batir por arriba al cancerbero. Fue un palo duro pues el equipo se encontraba mucho mejor sobre el terreno que el rival. Y aunque el partido estaba prácticamente sentenciado, los de Toni Ribera siguieron intentando hacer su juego para maquillar el resultado. Mori tuvo una de las ocasiones más peligrosas con un gran disparo de una falta que el portero envió a corner in extremis.
Al final 3-0 en el marcador. La blandura en defensa y la inocencia en ataque condenan a un Sporting que fue mejor a los puntos, pero en este deporte lo que cuenta son los goles. La próxima semana en Villena esperemos que cambie (de una vez por todas) esta dinámica negativa en la que se encuentra inmerso el equipo y al fin poder volver a dedicar una victoria a la afición.
Alineación titular: Jorge, Andrés, Paco, Santa, Perry, Mori, Chechu, Jordi, Javi, Carlitos y Bati.
El crack: Carlitos; el atacante villenense fue el que más peligro llevó a la portería visitante. Desde la izquierda o como segundo punta fue un auténtico quebradero de cabeza para la defensa chellina. Estuvo solidario en ataque, aunque esta vez sus asistencias no llegaron a convertirse en goles. El dandy: Gómez; el joven futbolista sportinguista aprovecha las ocasiones que tiene para demostrar que tiene un hueco en este equipo. En las últimas jornadas siempre saltó al campo en inferioridad numérica y con resultados adversos y se dejó la piel sobre el césped. Se multiplicó en ataque y defensa y aportó el oxígeno que necesitaba el equipo en la medular.
