El 11 de enero se inician las obras en el tramo Norte de la Avenida de la Constitución
Las obras de adecuación y reasfaltado del tramo Norte de la Avenida de la Constitución comenzarán tras el período navideño para evitar molestias al comercio de la zona, y estarán subvencionadas íntegramente por la diputación de Alicante.
Ayer tuvo lugar la firma del acta de replanteo con la empresa Pavasal, concesionaria de las obras de adecuación del último tramo de la Avenida Constitución, previa al inicio de las obras. Estas obras, que deberían haber comenzado antes de fin de año, darán comienzo el 11 de enero, tras solicitar a la Diputación de Alicante el aplazamiento de las mismas para evitar molestias al comercio y la hostelería durante el periodo navideño.
Las obras se llevarán a cabo desde la Plaza de Toros hasta la rotonda de La Morenica, en un primer tramo, y hasta la rotonda de Frutas Candela en un segundo tramo que tan sólo incluye la pavimentación. El presupuesto de las obras es de 300.000 euros, los cuales subvenciona al 100% la Diputación de Alicante y cuyo plazo de ejecución será de cuatro meses.
Este proyecto de adecuación en la vía pública ha estado precedido por un proceso de participación ciudadana en la que las asociaciones primero y posteriormente toda la ciudadanía ha podido proponer mejoras y modificaciones sobre la idea inicial del proyecto.
Proceso participativo
La empresa concesionaria está especializada en asfaltado y ofreció una serie de mejoras en otros campos que la determinaron como la oferta más ventajosa para la ejecución de las obras.Entre estas mejoras figura la instalación de un imbornal al final de la calle Ambrosio Cotes que permita la recogida de pluviales. Este proyecto incluirá también, dentro de las mejoras, los proyectos de la concejalía de Medio Ambiente para la mejora de las jardineras en la zona. Además se realizará un estudio para comprobar la salud y el estado de un olmo de grandes dimensiones que se encuentra antes de llegar a la rotonda de frutas Candela.
La idea del equipo de gobierno es poder conservarlo, pese a las obras de la zona, y para ello apuntalarlo, ya que se encuentra en una situación delicada. También se mejorarán pequeños tramos de aceras que se encuentran en mal estado y se retranqueará la valla del último tramo de la Avenida, lo que permitirá pavimentar al menos un metro más la calzada, con lo que se gana en seguridad para los peatones que salen a caminar o pasear por el entorno.
Además, un Plan de Atención Vecinal valorado en 6.000 euros servirá para que una persona sirva de nexo de comunicación entre las quejas y demandas ciudadanas con la dirección de obra durante los meses que duren las obras, una novedosa iniciativa que se adopta en Villena tras haber logrado buenos resultados en otras ciudades previamente.
