En un afán de que los españoles se olviden de los problemas que aquejan al país, el Gobierno no sabe a qué clavo ardiendo agarrarse. Aprovechando el revuelo que ha causado en Inglaterra la noticia de que un menor de 13 años ha dejado embarazada a una de 14, ahora va el PSOE y anuncia que piensa sacar una ley por la cual dejar preñada a una menor de 13 años no va a ser considerado delito. Todo esto con consentimiento. Lo que no sabemos es si el consentimiento lo tiene que dar la menor, los padres o los Reyes Magos.
Ahora digo yo, si esta aberración gubernamental se hace realidad cabe pensar por qué los menores de 18 años tienen prohibida la entrada en los bares si no van acompañados de sus padres porque no tienen nada mejor que hacer.
Incomprensible, porque a dichos menores sólo les queda pasar frío en los parques, ir a los recreativos a practicar la ludopatía (dinero del cual el Estado se lleva un pico largo) o, en su defecto, practicar también el onanismo (matarse a pajas, vamos).
Con tal de que el ser humano al completo sienta el bienestar que nos venden los gobiernos a bombo y platillo se crean leyes insulsas para que dejen de preocuparse de lo que en verdad importa en el mundo, como es el hambre, la guerra, los genocidios y un sinfín de etc. En consecuencia, más vale obnubilar al personal que poner sobre la mesa soluciones factibles. Total, una cabronada.
Lo dicho, es más importante saltarse la Ley del Menor que protege a susodichos, que solucionar el cotarro en el que ellos solitos nos han metido.
Bueno, hasta más ver pues, majos.
Fdo: Tony Piojo
