El alcalde acusa al PP de mentir sobre la piscina cubierta y le insta a asumir su responsabilidad en el déficit de ésta
Tras acusarle el portavoz del Partido Popular, José Joaquín Valiente, de no haber ejercido un control sobre la gestión de la piscina cubierta municipal, el alcalde de Villena, Francisco Javier Esquembre, ha pedido a dicho partido que asuma su parte de culpa en que las pérdidas de este centro deportivo en su primer año de apertura hayan ascendido a más de 600.000 euros.
En cuanto al portavoz popular, el alcalde aseguró que estaba mintiendo a la ciudadanía para generar dudas sobre la gestión del equipo de gobierno, pues sabe perfectamente que para modificar los horarios y las tarifas de la piscina es necesario modificar todo el contrato, que firmó el Partido Popular.
Y según él, los populares saben también que el 90% del exceso de obra (cifrado en unos 600.000 euros) de estas instalaciones se produjo cuando ellos gobernaban y solo un 10% bajo el gobierno de esta coalición. Además les acusaba de no haber reconocido nunca ese exceso de obra, y ni siquiera supervisarlo, igual que con el transformador para poner en funcionamiento este edificio, que no quiso construir y posteriormente bloqueó su puesta en marcha.
Esquembre admitía que el pasado verano la coalición de gobierno intentó cambiar tarifas y horarios, como había propuesto la empresa, para que este servicio fuese más competitivo y las pérdidas menores. Pero la Interventora nos advirtió entonces que para ello había que esperar a tener los resultados del primer año de gestión del centro y a la realización de una auditoría, aseguraba.
Asimismo el alcalde negaba que el equipo de gobierno integrado por Los Verdes, PSOE y VCD no hubiera mantenido reuniones con los representantes de la empresa para intentar realizar estos cambios. Sí hemos tratado este tema en numerosas ocasiones, pero la adjudicataria siempre ha manifestado que las modificaciones serían a riesgo y ventura del Ayuntamiento, decía.
Como ya señalaba hace unos días, Esquembre insiste en que el déficit de la piscina en cuanto a la amortización de la obra es prácticamente insalvable y que Villena tendrá que asumir por el mismo el pago de unos 300.000 euros anuales. No obstante, el tripartito considera que sí se pueden reducir las pérdidas por la asistencia de usuarios, quedando en unos 80.000 euros la cantidad que tendría que pagar el Ayuntamiento.