El ayuntamiento, en tierra de nadie ante el anuncio del cierre de los acuíferos

El alcalde, Fulgencio Cerdán, se ha referido al anuncio del cierre de los acuíferos del Vinalopó en el plazo de un año realizado por la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ), una buena noticia para nuestra ciudad que, sin embargo, choca contra los intereses de agricultores y regantes.

Cerdán recordaba que dicho cierre “es una larga reivindicación de nuestra comarca” y que se hace totalmente necesario ante “el alto índice de degradación de los acuíferos”, hasta el punto de que “es algo que se debería haber hecho hace mucho tiempo”, pero garantizando siempre “el agua a buen precio para regantes y agricultores”.

De hecho, el alcalde admitía que los precios barajados por la CHJ y la Generalitat son “bastante altos para ser asumidos por el sector agrícola”, por lo que calificaba el cierre como “un arma de doble filo”.

Así, el ayuntamiento se encuentra en estos momentos en tierra de nadie, satisfecho por un cierre que garantiza una reducción de las extracciones y, por tanto, una mayor viabilidad de los acuíferos, pero al mismo tiempo preocupado por las repercusiones que esta medida puede tener en el sector agrícola local y en la economía de la ciudad en su conjunto.

Por ello, “esta misma tarde voy a mantener una reunión con los agricultores”, decía Cerdán, anunciando que “en breve vendrá la Consellera de Agricultura para visitar las obras de la estación depuradora de aguas residuales de Villena y vamos a intentar aprovechar la ocasión para facilitar un encuentro y que los regantes puedan trasladarle sus preocupaciones”.

“Nos hemos dado un año antes de proceder al cierre los pozos”, concluía el alcalde, apuntando que “el ayuntamiento intentará facilitar que se alcance un acuerdo entre las partes”, aunque subrayaba que “en todo momento defenderemos los intereses de nuestros agricultores”.

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