El Ayuntamiento estudiará declarar Bien de Relevancia Local la Plaza de Toros y el Teatro Chapí

La situación de la Plaza de Toros de Villena volvió a ser el centro del más agrio debate en el pasado Pleno, tras la retirada de la arena del ruedo y los próximos cambios anunciados por el equipo de gobierno, que habían llevado al Partido Popular a exigir que se paralicen las actuaciones y que se proteja el edificio declarándolo Bien de Relevancia Local. El tripartito anunció que estudiará dicha protección, pero que va a seguir con las modificaciones para dar al edificio mayor variedad de usos.
La concejala popular Celia Lledó sostenía que el equipo de gobierno “se propone desmantelar e ir expoliando” el inmueble y “convertirlo en una ruina, simplemente por ser una plaza de toros”, y por ello “no le da un mantenimiento y la tiene infrautilizada”, pese a que “está preparada para ser plurifuncional”. En este sentido aseguraba que el tripartito había actuado “con nocturnidad y alevosía” al extraer el albero del coso taurino.

La edil del PP aseguró ante el Pleno que en la visita que hace unos días ella y sus compañeros efectuaron a la Plaza, pudieron comprobar los desperfectos que presenta el inmueble, algunos que ella achacaba al “gamberrismo” durante la fiesta Aúpa Lumbreiras. Denunciaba que los camiones que retiraron la tierra del coso taurino habían dañado la tela asfáltica que cubre el suelo y que la brigada municipal de Obras había parcheado después con hormigón sin arreglar dicha tela. Asimismo lamentaba que no se aclarase que se pretendía hacer “pues según el técnico que nos acompañó se planteaba hasta quitar parte de los toriles y poner un campo de césped artificial”.

En nombre de los tres partidos del gobierno habló la edil verde Mercedes Menor, negando el “desuso” de la plaza e insistiendo en que se había quitado la arena precisamente para realizar más eventos. Afirmó que quien había desmantelado el edificio original había sido el PP, al derribar todo el graderío, pese a los informes que aconsejaban mantenerlo. Incidió en que retirar la arena era “una actuación reversible y no afecta a la estructura original” y negó que se hubiera dañado la tela asfáltica.

Asimismo la portavoz verde echaba en cara a Lledó que pidiese que fuera Bien de Relevancia Local, cuando fue el PP quien en 1995 aprobó iniciar los trámites y después los abandonó. Menor indicó que votarían en contra de la moción, pero anunció que habían pedido a los técnicos que informen sobre qué edificios merecen recibir dicha catalogación, entre los que el tripartito propone la propia plaza de toros y el Teatro Chapí.

La edil popular defendió su gestión, diciendo que se tiraron las gradas para proteger la fachada y que finalmente la empresa demolió las bóvedas que se intentaba conservar “por su mal estado y porque los técnicos así lo recomendaron”. También acusó al equipo de gobierno de no reclamar el dinero pendiente de la rehabilitación de la plaza a la Generalitat Valenciana y al actual alcalde de “consentir que no pague la plaza hasta 2016”, al firmar un nuevo convenio ocultando su contenido.

Estas palabras provocaron una airada protesta de Javier Esquembre, recordando el alcalde que el convenio se aprobó en el Pleno y que firmarlo “era la única forma de que cobremos algo de lo que debe el Consell”. Muy enfadado el acalde señaló que el PP si había desmantelado el patrimonio municipal “al retirar los escudos y la verja del monumento a Chapí y no reponerlos”

Liquidación de la obra
En la misma sesión también se aprobó –absteniéndose el PP– la liquidación definitiva de las obras de restauración de la plaza y construcción del parking subterráneo bajo la misma, que arrojaba un saldo favorable al Ayuntamiento de 173.294 euros.

El equipo de gobierno ha tardado más de un año en presentar la liquidación por la falta de acuerdo con la empresa que ejecutó el proyecto (la UTE Secopsa-Viarsa), respecto a las deficiencias, pero también sobre el “project monitoring”. En este sentido el alcalde declaraba que “es gravísimo que el gobierno de Celia Lledó permitiera a la empresa contratar por su cuenta este trabajo, sin adjudicación pública, pese a que ascendía a casi 500.000 euros y no se ha justificado que se hayan gastado”.