El calendario
Estamos acabando el año y es tiempo de buenos propósitos, buenos deseos y buenos calendarios. Eso mismo debieron pensar los responsables de la compañía de aerolíneas Ryanair, de Irlanda. ¡Todo sea por una buena causa! Y se lanzaron a desnudar a sus empleadas. Y, aunque no dudamos de que puedan tener una buena causa, discrepamos de la forma y, si nos apuran, hasta del fondo. Y lo hacemos por dos razones.
1º Porque la solidaridad la podrían haber demostrado realizando una aportación económica a la entidad elegida.
2º Porque presentan un calendario donde aparecen como modelos doce auxiliares de vuelo, trabajadoras de la citada compañía. Y aparecen no en el ejercicio de sus funciones ataviadas con el uniforme de rigor, como cabría esperar, sino equipadas con minúsculos bikinis y en posturas que nada tienen que ver con su ocupación habitual. Y eso, se mire por donde se mire, no es más que la utilización de la imagen de la mujer como objeto sexual. Y esto atenta gravemente contra la dignidad de la persona.
Ya sabemos que nos pueden decir que las chicas lo han hecho voluntariamente, pero ésta no es la cuestión. También muchas mujeres prostituidas, dicen que lo son por voluntad propia.
Además, a todo lo anterior hay que añadir que la utilización publicitaria del cuerpo de las mujeres de la citada compañía de aerolíneas, denigra no sólo a ellas mismas como personas trabajadoras, sino al resto de las profesionales del sector y por añadidura a todas las mujeres, ya que vuelven a desempolvar los rancios estereotipos sexistas que ya creíamos superados.
Fdo: Rosalía Sanjuán. Colectivo Luna de Mujeres. Villena