El Centro Especial de Empleo Integra2 para personas con discapacidad, en situación crítica por los impagos de Generalitat y Ayuntamiento
Según denunciaba ayer Antonio Ruescas, presidente de AMIF (Asociación de Discapacitados Físicos de Villena y Comarca), el Centro Especial de Empleo Integra2 por el trabajo que gestionan junto a AFEPVI (Asociación de de Familiares y Personas con Enfermedad Mental del Alto Vinalopó) se encuentra en situación límite por el retraso en el abono de las subvenciones por parte de la Conselleria y de las facturas por parte del Ayuntamiento de la ciudad.
El proyecto Integra2, que se puso en marcha hace cinco años, posibilita a 30 personas con discapacidad trabajar con condiciones y sueldos dignos, pero la situación es insostenible para una pequeña empresa como ésta, que ya a finales de 2011 denunció que la administración local y autonómica le adeudaba unos 300.000 euros.
Como recordaba Antonio Ruescas, uno de los principales clientes de la empresa es el Ayuntamiento de Villena, pero como centro de empleo protegido también dependen de una serie de subvenciones de la Conselleria de Educación, Formación y Empleo. Y entre estas dos administraciones, sobre todo, nos están asfixiando, afirmaba de forma contundente.
Aunque no tenía los datos exactos, afirmaba que la deuda asciende a unos 400.000 euros. Concretamente la Conselleria les debe dinero desde septiembre de 2011 y el Ayuntamiento también tiene contraída con ellos una deuda bastante importante. En este sentido indicaba que con el Plan de Pago a Proveedores el consistorio pudo pagarles algunas facturas pero otras no.
La empresa tiene un acuerdo con Banca Ética que les permite negociar las facturas del consistorio pero nos encontramos con problemas a la hora de recoger las firmas de los concejales o técnicos de turno que todavía nos retrasan más el poder ejecutar esas facturas, añadía Ruescas.
Hasta tal punto es crítica la situación económica de Integra2 que han tenido que empezar a despedir a personal, a reajustar jornadas y a recortar sueldos. No sé hasta donde podremos llegar declaraba el presidente de AMIF, pero es una lástima que por estos retrasos en los pagos se venga abajo un proyecto empresarial ilusionante, que daba trabajo a una treintena de personas con discapacidad, que en algunos casos sería imposible que encontraran un empleo ordinario.
