El ferrocarril siega una nueva vida en Villena
Un vecino de la pedanía villenense de La Encina fallecía hoy, alrededor de la 1 de la tarde, al ser arrollado por un tren. Al parecer la víctima volvía de coger higos en las cercanías y no se ha percatado de la llegada del tren por la vía contigua. Se trataba de un hombre de avanzada edad y que, según hemos podido saber, padecía cierta sordera, por lo que no habría escuchado a tiempo el sonido de la máquina.
Pocos minutos después del accidente se desplazaban al lugar tanto efectivos de la Guardia Civil como Bomberos y una ambulancia, no pudiendo hacer nada por salvarle. Los agentes y personal de ADIF seguían rastreando la zona horas después. Se da la circunstancia de que el lugar donde ocurrían estos hechos confluye varias vías, unas todavía utilizadas y otras no, pero no existe ninguna valla de protección, por lo que algunas personas suelen cruzar por allí, con el consiguiente riesgo.
Los vecinos que han colaborado en la identificación del cadáver indicaban que el tren no ha llegado a golpearle de frente, puesto que su cuerpo presentaba únicamente heridas en una mano y un pie. Por tanto, lo más probable es que haya sido aspirado por el vacío que produce el tren a causa de la velocidad, siendo empujado a unos metros de la vía y provocándole la muerte el propio golpe.
La víctima se llamaba Francisco Cantos y, aunque había nacido en La Encina, actualmente residía en Castellón, pero pasaba largas temporadas en la vivienda que aún poseía en la pedanía. Pertenecía a la familia del propietario de Carnicería Tani.