El Grupo Verde pide al PP que reflexione antes de retomar la licitación de la piscina cubierta

Después de que el Pleno dejara desierta la adjudicación del proyecto de la piscina cubierta municipal por los informes desfavorables existentes, Los Verdes han pedido reflexión al equipo de gobierno para no volver a caer en el mismo error. En este sentido proponen encargar el nuevo estudio de viabilidad a una empresa privada, así como que se escuchen las opiniones de los colectivos que mayor uso darán a este servicio público y que se ajuste el proyecto a las necesidades reales de la ciudad, en lugar de buscar que esta piscina sea un referente a nivel provincial.
La edil Cate Hernández hacía hincapié en que fue el informe de la Secretaria Municipal que pidieron Los Verdes y el PSOE el que “hizo que el PP desistiese de su idea de adjudicar la piscina, a pesar del daño que previsiblemente podía hacer a la ciudad”. Además incidía en que durante todo el proceso no han escuchado a los clubes deportivos que pedían participación y han intentado forzar la legalidad y las condiciones reflejadas en el pliego de condiciones aprobado por ellos mismos. Y para que estos errores no se vuelvan a cometer al iniciar de nuevo los trámites para adjudicar la piscina proponen varias cosas.

En primer lugar señalan que el estudio de viabilidad económica adolecía de un estudio de mercado riguroso que ayudara a conocer exactamente la demanda de la ciudadanía. Por ello plantean que se encargue un nuevo estudio de viabilidad a una empresa especializada que tenga experiencia previa.

En segundo lugar recomiendan reunirse con los clubes deportivos, el Centro de Atención a Mayores y APADIS para determinar qué servicios municipales se debe ofrecer. Con estos datos se podrán delimitar mejor los pliegos de condiciones que se exijan a las empresas que se presenten al concurso público.

Y por último señalan que la piscina cubierta será con toda seguridad deficitaria, por lo que creen necesario diseñar un proyecto que se ajuste a las necesidades actuales con previsión de futuro, a fin de limitar el coste que para el Ayuntamiento tendrá soportar el equilibrio financiero de esta infraestructura. “Y si dentro de cuarenta años si se ha quedado pequeña (la piscina) ya nos lo volveremos a plantear”, añadía.