El Huerto de la Pona, en peligro tras las quejas vecinales por los ruidos
Problemas a la vista para la comparsa de Labradores. La Junta de Gobierno del pasado 27 de julio abordó, tras la presentación de varias quejas por parte de vecinos, los problemas causados por los ruidos del Huerto de la Pona, acordando pedir a la comparsa el cese de las actividades de ambientación musical.
Son varias las quejas vecinales, una de ellas respaldada por las firmas de alrededor de 40 vecinos del local festero, que da a la calle Nueva. Por ello, la Junta de Gobierno acordó, por unanimidad, requerir a la comparsa una auditoría acústica favorable, que en caso de no ser favorable conllevaría una suspensión temporal de la licencia municipal.
Asimismo, se acordó pedir a los Labradores el cese de las actividades de ambientación musical tanto en el patio como en el interior de la casa, ya que este tipo de actividades no están contempladas por la licencia municipal.
Compatibilizar tradición y derecho al descanso de los vecinos
Puestos al habla con el presidente de la comparsa, Francisco Navarro Maestre, ha señalado que por el momento no nos ha sido notificado ese acuerdo de Junta de Gobierno, aunque admitía que quejas de vecinos han existido desde el año pasado.
Con todo, señalaba que la política de la comparsa ha sido siempre la de compatibilizar el descanso de los vecinos con las actividades festeras, por lo que nos comprometimos a poner fin a la música a las 0.30 horas durante las noches de verano, y el pasado sábado finalizamos nuestra presentación a las 2. También decidimos hace tres años no acoger en nuestra casa actos como bodas, bautizos y comuniones, pero como el resto de comparsas han seguido haciendo ese tipo de celebraciones, hemos decidido volver a poner la casa a disposición de nuestros socios.
Señalando que entiendo perfectamente a los vecinos, Navarro Maestre apostaba por la conciliación y compatibilizar las tradiciones festeras con el derecho al descanso de los vecinos, añadiendo que el ayuntamiento podía ejercer de mediador en estos casos. Asimismo, señalaba que las comparsas tenemos licencia como sede festera, por lo que si se suspende la licencia, habría que suspender todas esas actividades, recordando que con la ley en la mano, todas las comparsas estamos fuera, pero o se siguen haciendo esas actividades o nos cargamos las fiestas, concluía.