En estos últimos días estamos conociendo a través de diversos medios de comunicación el verdadero talante y forma de gobernar del anterior equipo de gobierno con Vicenta Tortosa a la cabeza. Por ejemplo, sabemos que la ya ex alcaldesa de la ciudad está imputada en un delito de prevaricación por presuntas irregularidades en la concesión de la licencia a Vaersa, o que su gobierno se gastó en 9 meses la friolera de 30 millones de pesetas en una televisión de partido a su imagen y semejanza, con el dinero de todos los villenenses, o que el tripartito solicitó casi 10 millones de euros en préstamos, algunos hasta 30 años.
Cada día que pasa nos vamos reafirmando en el por qué Vicenta Tortosa es hoy ex alcaldesa de Villena y sobretodo en el por qué el Partido Socialista le recompensa incluyéndola en las listas al Congreso de los Diputados como número 7 por Alicante, cuando todo el mundo puede ver su gran gestión al frente del Ayuntamiento de Villena, su firme defensa del agua para los villenenses, sus promesas cumplidas, sus proyectos fatuos y necesarios (como el parking en la Avenida de la Constitución) para la ciudad, su soterramiento de las vías y sobretodo, su más firme compromiso con el patrimonio de la ciudad (dejando que se despeñase la Plaza de Toros).
Ante todos esos éxitos, el Partido Socialista ha decidido, dada la gran gestión de Vicenta, premiarla con el número 7 de las listas al Congreso. El Partido Popular, por el contrario, utiliza los principios del esfuerzo y el trabajo duro, o como el propio Camps calificaba a los cabezas de lista del PP por Alicante el pasado jueves, como auténticos currantes. En cambio el PSOE utiliza otros mecanismos, incluyen a los que son imputados por prevaricación o los que al frente de su gestión dejan deudas a 30 años de 10 millones de euros y sobretodo, no para inversiones que disfrutemos los ciudadanos, sino para algunas razones que todavía no conocemos puesto que todo ese dinero no sabemos dónde ha ido a parar, porque la ciudad de Villena no ha experimentado cambio alguno en cuatro años de gestión socialista. Ése es el talante del Partido Socialista y ésa es la recompensa a su representante número 7 por Alicante, la verdadera forma de gobernar del PSOE.
Quizá esa recompensa venga dada por defender lo indefendible, porque salir en defensa de un agua contaminada para nuestra ciudad y mentir a los ciudadanos durante cuatro años, en contra de los intereses de la ciudad, tiene que tener sin duda alguna contraprestación. Esperemos, dado su legado, que si esta señora llega al Congreso de los Diputados, no siga boicoteando los intereses reales de Villena, como ha hecho durante 4 años al frente del Ayuntamiento. La mentira, el sectarismo, el descontrol en el gasto y el desgobierno, son el verdadero legado de Vicenta Tortosa para la posteridad y eso no hay premio que lo enmiende.
