El No-Do

En España están sucediendo cosas que a costa de escuchar que son normales parecen normales. Hechos que al ser tratados desde el Gobierno con la mayor naturalidad están propiciando que los españoles nos estemos impermeabilizando y asumiendo que los límites de la ley están donde dice ZP que están. En los últimos días nos hemos hecho eco de diferentes noticias que parecen una cosa pero que podemos ponerlas boca abajo con sólo cambiar los sujetos y los complementos directos.
Un grupo de componentes de las Nuevas Generaciones del Partido Popular revienta un acto del PSOE en Valladolid, impidiendo el acceso de los asistentes al salón de actos y agrediendo a De la Vega y a José Blanco. Sin embargo la realidad es que esto sucedió en Martorell, los agresores eran separatistas de las Juventudes Socialistas catalanas y los agredidos Acebes, Piqué y simpatizantes. Las fuerzas de orden público estaban desprevenidas y la genial respuesta del radical que tenemos como presidente del gobierno es que él sí que se encuentra a gusto en Cataluña, no como otros. Y no es la primera vez que sucede.
Un pederasta que violó a veinticinco niños termina su huelga de hambre tras conseguir que se reduzca su pena de mil a dos años. Sin embargo la noticia no es ésta, porque el caso es que el beneficiario de los saldos de otoño en el Estado de Derecho ha sido el etarra De Juana Chaos. De nuevo la respuesta de Rubalcaba es que todo se ha realizado dentro de la ley. Y ya van unas cuantas.
Siete de los ocho narcotraficantes detenidos, pues uno de ellos se halla en paradero desconocido, aceptan la condena negociada de un año de cárcel pese a enfrentarse a los cien que pedía el fiscal. Al carecer de antecedentes no ingresarán en prisión. Sin embargo la noticia de verdad es que a los terroristas callejeros del País Vasco les cobran a precio de Andorra los autobuses quemados, los millones de pérdidas en desperfectos y el miedo que generan entre los que no piensan como ellos. Y esto es a diario.
Seguro que si a uno de Villena se le ocurre quemar el piojo se le cae el pelo y si comenzase el acoso contra algún edil, este pediría con toda la razón el amparo de quien fuese. Recuerden cuando lo practicaron los policías locales reivindicadores.
En el Campo Municipal La Solana se ha celebrado un encuentro de fútbol entre las selecciones nacionales de Villena y El Bonillo. El campo se llenó de banderas nacionalistas, de pancartas que exigían la independencia y gritaban que Villena is not Valencia. De igual modo se aprovechó el acontecimiento deportivo para pedir la excarcelación de los detenidos en la Operación Malaya. Sin embargo esto sucedió en Barcelona y hubo reclamos suficientes para que el Fiscal General de Estado tuviese que echar horas extras. Y ya van muchos antecedentes.
Los asociados de la AVT impiden que se celebre la cumbre internacional de la vivienda en Barcelona. Bueno, ya saben que la noticia real ha sido protagonizada por los okupas.
Las segundas partes de estos casos se aceptan como legales desde el punto de vista de la ley y normales por su cotidianeidad. Los párrafos superiores son inventados y estoy convencido de que estos sí hubiesen contado con la correspondiente intervención de la Fiscalía. El gobierno actual permite y alienta casos como los comentados, y espero que hayan establecido algún límite.
Lo que me preocupa es que llegado a este punto del texto, pueda aparecer alguna patinadora afirmando que yo he comparado a ZP con un okupa. ¡Qué será de mí!