Una frase que ya se escucha mucho en todas partes es el famoso ya huele a fiestas, o si no, este otro, ya huele a alhábega, aunque de seguir las cosas por este camino, mucho me temo que el olor de estas fiestas no va a ser el de la alhábega precisamente.
En principio dos posturas irreconciliables y que lo único que demuestran es la falta de interés de unos y otros por lo que ocurra durante las fiestas de Villena. El alcalde intentando arreglar el asunto, que, a lo que se va viendo, le queda grande, y los sindicatos, sobre todo CC.OO., sacando un músculo que perjudica gravemente a los villeneros que, festeros o no, quieren disfrutar de las fiestas a su Patrona. Eso sí, de ver naves cerradas y con el cartel de Se Alquila bien puesto, sacando todas las tardes-noches basura a la puerta con restos de producción realizada, no saben o no quieren saber. Se ve que les preocupa más la firma en agosto que una economía sumergida que hace daño a todo el mundo, parados o activos, pues es una fuente de ocultación de impuestos, esos que luego nos suben por que hay que pagar mucho entre todos
menos entre los que practican la economía sumergida, que tan poco le importa al sindicato.
Los Verdes, preocupados por los toros, tampoco abren la boca sobre este asunto y es que es uno de esos temas complicados. Si apoyan la huelga, quedan a mal con los votantes. Si apoyan las fiestas, quedan a mal con los trabajadores. Se ve que de chiquillos nadie les enseñó que en esta vida hay que tomar partido siempre y que el limbo de los justos ya ni la Iglesia lo quiere. Al PSOE y al otro partido, ese de los ex miembros del PP que no se sabe bien qué hacen en el ayuntamiento, salvo decretos de urgencia para que haya toros, tampoco parece que se les haya oído. y es que a veces, dicen que más vale un buen silencio que una mala palabra.
Por el camino, las comparsas y el resto de villeneros, de nacimiento y de adopción, que no sabemos a ciencia cierta si podremos ver el alegre desfilar de las comparsas con la sonrisa en la boca o en su lugar, con una mascarilla.
Señores de la limpieza. Su miedo es que se pierda el convenio que llevan firmado desde hace no sé cuantos años. Dicho convenio creo tiene vigencia hasta diciembre. Pues bien, hagan huelga en otros días y no minen la imagen de un pueblo cara a un turismo que siempre deja dinero, que no está el horno para bollos. Dejen que las fiestas transcurran como deben transcurrir, con paz, armonía y alegría y no se dejen malaconsejar por sindicatos que tan solo buscan su propio protagonismo e interés.
Señores de la dirección. Su miedo es perder la contrata que, se rumorea estos días, tal vez no les vuelvan a otorgar. Pues batallen con métodos limpios y no permitan que este pueblo no disfrute de sus fiestas tal y como antes he pedido.
Sr. Alcalde. Sea valiente por una vez y vaya preparando un listado de servicios mínimos de esos que asusten. Que todo el mundo se dé cuenta de que Villena está por delante de todo, y eso sí, si después de todo la huelga se diera, tome buena cuenta de cómo habría que tratar a partir de entonces a empresa, trabajadores y lideres sindicales, que habrán demostrado que lo del olor a fiesta y alhábega no va demasiado con ellos. Tal vez ya tengan la pituitaria bloqueada por tanto olor a basura.
