Arte

El pintor villenense Juan Flor dona una de sus obras a la Casa de Cultura

Una nueva obra se ha incorporado hoy a la colección artística del Ayuntamiento de Villena. Se trata de una donación del pintor villenense Juan Flor Azorín, que bajo el nombre de “Escaramuza del Cid a su paso por Villena”, representa con su reconocible estilo un pequeño fragmento de nuestro pasado como ciudad.
El cuadro ya colgaba hoy del despacho de la concejala Isabel Micó en la primera planta de la Casa de Cultura cuando se procedió a la firma del acta de donación de la obra, valorada en 1.200 euros. La edil de Cultura se comprometía con esta firma, y en nombre del ayuntamiento, a cuidar por la conservación del cuadro y exponerlo en algún edificio municipal.

Esta donación es un gesto de gratitud de Flor Azorín a la ciudad de Villena y especialmente a la Casa de Cultura, que acogió su “retorno” a la pintura con la exposición que realizó el pasado junio después de 20 años sin pintar. Esta última exposición culminó con una afición que comenzó a la temprana edad de 6 años en la escuela de dibujo de Yecla y que también es reflejo de la experiencia de un profesional dedicado toda su vida al diseño de muebles y trajes festeros, que reconoce que “modela mejor que pinta”.

“Escaramuza del Cid a su paso por Villena” surgió cuando el pintor vio el cartel de Camino del Cid a su vuelta de Yecla y pensó en hacer referencia en alguna de sus pinturas al paso del Cid por nuestras tierras, un episodio de la historia de Villena datado en 1089. Aunque los historiadores no acaban de coincidir y no existe suficiente documentación al respecto, todo apunta a que ante la escasa relación con el rey Alfonso VI, las tropas capitaneadas por El Cid hicieron una pequeña escaramuza a su paso por nuestro término, momento que ha sido inmortalizado por Juan Flor, que reconoce su pasión por los pasajes medievales y los temas históricos que abundan entre su obra. Esta misma imagen fue la portada del Especial de Fiestas 2011 de EPDV, que además repartió litografías entre los lectores que adquirieran este número especial con motivo de las fiestas de Moros y Cristianos.

El personal estilo de Juan Flor juega con las transparencias, realizando una pintura realista que se vale de filtros para descomponer el color. La técnica acuarelable es la que mejor se adapta a su forma de entender la pintura y en este caso, impregna de color los 43x45cm de lienzo que a partir de hoy se podrán apreciar en este despacho la Casa de la Cultura.

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