El Pleno acuerda reparar la techumbre del edificio de la Electro-Harinera
La mayoría de las mociones del pleno ordinario de noviembre celebrado anoche fueron aprobadas por unanimidad, resultando la sesión una de las más cortas de los últimos meses, unas dos horas. Entre los acuerdos adoptados, cabe destacar la reparación de la deteriorada cubierta de la Electro-Harinera, solicitada por el Partido Popular.
El arreglo del tejado se hace necesario para evitar nuevas filtraciones de agua que podrían dañar la estructura del inmueble, declarado Bien de Relevancia Local. Por ello el equipo de gobierno aceptó la propuesta del PP, aunque la edil de Cultura, Isabel Micó, apuntó que es el Consell quien tiene paralizada desde el año 2010 la licitación de las obras para restaurar la Electro-Harinera como Museo de la Ciudad. También se aprobó por unanimidad la moción del Grupo Popular para hacer accesible la concejalía de Educación, con la instalación de un ascensor en el edificio.
El PP aceptó la propuesta del tripartito para apoyar la iniciativa popular de ADICAE para aprobar una proposición de ley que califique de abusivas la claúsulas suelo en los créditos hipotecarios. El debate de este punto contó con la intervención de Mª Carmen Cuenca, en nombre de ADICAE. Igualmente los populares se sumaron a la moción de la edil de Turismo para solicitar a la Agencia Valenciana de Turismo que declare las fiestas de San José y del Medievo como Fiestas de Interés Turístico de la Comunidad Valenciana.
Lo que el equipo de gobierno rechazó fue la moción del PP para incluir en los presupuestos municipales de 2014 una partida para comenzar la Fase II de las obras del Conservatorio de Música en el Teatro Chapí. El edil de Hacienda, David Molina, propuso dejarlo sobre la mesa para valorar antes otras inversiones que eran prioritarias (como el encauzamiento final de la Rambla Conejo) y después hablar de si el presupuesto permite liberar esa partida que podía superar los 400.000 euros, algo que los populares no aceptaron.
Por último, y a petición de los trabajadores del Centro Geriátrico La Morenica, situado en Villena, se aprobó una moción conjunta para demandar a la Generalitat Valenciana que pague la deuda de cerca de 16 millones de euros que tiene pendiente con la empresa El Castillo, que gestiona dicho geriátrico. Una deuda por la cual los 150 trabajadores del centro llevan dos meses sin cobrar.
Además en esta sesión Cristóbal Gisbert tomó posesión de su acta de concejal del Partido Popular, tras la renuncia al cargo, hace un mes, de Jesús Martínez. El alcalde Javier Esquembre, le dio la bienvenida como miembro del Pleno Municipal y le impuso la insignia de la ciudad.
