El PP pide adaptar los horarios de la lanzadera que llega a la UA a los nuevos trenes de Cercanías

Tres son las mociones que el Partido Popular presenta al Pleno de octubre, que se celebra la semana que viene. En la primera de ellas pida una actuación urgente respecto a la llamada Casa de los Radioaficionados, en la zona de las Cruces, ya sea rehabilitación, tapiado o derribo.
Miguel Ángel Salguero recordaba que hace unos meses, con motivo de una moción sobre el estado de la vegetación y la señalización en la zona, los populares ya alertaron del peligro que supone el mal estado de dicha construcción, instando al equipo de gobierno a tomar alguna medida al respecto, como rehabilitar, tapiar para impedir el acceso o, directamente, demoler la casa, una propuesta “que fue aprobada por unanimidad pero que sin embargo no ha sido atendida en todos estos meses”, decía el portavoz popular. Por ello, los populares vuelven a reclamar ahora dicha actuación urgente, en este caso referida únicamente a la vivienda en cuestión.

Lanzadera con la Universidad de Alicante
Por otro lado, y tras la entrada en funcionamiento de las nuevas frecuencias de trenes de Cercanías entre Villena, Alicante y la Universidad, los populares han comprobado que los horarios de llegada de los trenes al apeadero de la UA no coinciden con los del servicio de buses lanzadera que unen dicho apeadero con la campus universitario, ubicado a unos dos kilómetros de distancia.

Por ello, piden al Pleno que se acuerde solicitar a la Universidad de Alicante que “adecue el horario del servicio de lanzadera a los nuevos horarios de los trenes de Cercanías a fin de facilitar el acceso de los estudiantes hasta el campus”. Además, piden que se dé traslado de dicho acuerdo al resto de ayuntamientos usuarios de la línea ferroviaria (Sax, Elda-Petrer, Novelda-Aspe, etc.) a fin de sumarse a esta solicitud.

Reivindicación de la Transición
Por último, los populares se hacen eco de una moción tipo presentada por su partido en todas las instituciones y en la que se reclama “reivindicar los valores y principios de la Transición y rechazar el revisionismo sobre esa época y las instituciones, como la Monarquía Constitucional, que hicieron posible el consenso que nos ha dado la mayor época de estabilidad de nuestra historia”, así como “defender los símbolos que nos representan a todos y la propia Monarquía como símbolo de la unidad y permanencia de una nación milenaria”, concluía Salguero.