Política

El PP pone en duda los conocimientos de Beltrán a la hora de supervisar un proyecto urbanístico

Aprovechando su comparecencia de hoy, María José Hernández ha respondido a las críticas del concejal de Urbanismo, Carlos Beltrán, sobre las deficiencias detectadas en el proyecto de mejora de los accesos al Grec, cuestionando sus conocimientos sobre los procedimientos a seguir respecto a revisiones y trato con la administración.
En primer lugar, la concejal popular recordaba que el acta de replanteo de la obra fue firmada el pasado 3 de enero “por la máxima autoridad del ayuntamiento sin poner observación alguna a la misma”. Por lo tanto, tras haber dado esa conformidad, “no vale decir ahora que hay deficiencias”.

Asimismo, señalaba a Beltrán que el proyecto “no se revisa con la empresa constructora, que no tiene capacidad de decisión, sino con la promotora, que es la Diputación”. Lo que debería hacer un concejal de Urbanismo, añadía, “es estudiar el proyecto con los técnicos municipales, detectar los puntos susceptibles de mejora y ponerse en contacto con la dirección de obra, primero, y la Diputación, después, para que dichas modificaciones se puedan introducir en la obra en ejecución”. Al respecto, ponía como ejemplo el cambio de ubicación de una farola que entorpece una entrada al colegio El Grec.

Del mismo modo, y en respuesta a otra de las críticas de Beltrán, Hernández afirma que el proyecto “sí contempla, en la medida de lo posible, futuras actuaciones, pues el trazado se ajusta fielmente al PGOU y respeta las rasantes del sector el Grec”. Ahora bien, añade, “lo que no puede asumir el proyecto es la totalidad de las obras incluidas en el proyecto de Servicios Generales y cuya financiación está conveniada con 4 actuaciones urbanísticas”. En particular, Hernández se refería a la sustitución de una tubería de medio metro de diámetro por una de 1,2 metros, señalando que supondría un sobrecoste de “más del 10% del proyecto que le correspondería asumir a sectores urbanísticos cuyo desarrollo, lamentablemente, está gravemente comprometido por la situación económica actual”. Decía Beltrán que “habrá que levantar la calle en tres o cuatro años para sustituir un tubo por otro… y ojalá tenga un ángel en la boca y sea así, porque sería señal de que Villena vuelve a crecer, pero nos tememos que para que este tubo de 500 milímetros sea insuficiente, habrán pasado de 10 a 15 años”.

Igualmente, la edil popular señalaba que la retirada del vallado que protege la salida de los alumnos del Grec se justifica por la estrechez de la acera actual, “que una vez ampliada no requerirá de esta instalación protectora”. Del mismo modo, en referencia a la “decoración innecesaria” de una rotonda, Hernández ha señalado que ésta consiste “en la plantación de un olivo y la extensión de grava por un importe total de 700 euros”, y por último, tras afirmar Beltrán que esa misma rotonda tiene una torre eléctrica “en el centro”, la edil popular afirmaba que “Beltrán no ha debido apreciar, en el concienzudo estudio que está realizando del proyecto, que la torre no está en el centro de la rotonda, ni siquiera está en la rotonda, sino dentro de lo que el proyecto denomina isleta deflectora”.

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