El PP rechaza rotundamente la subida de la tasa de basuras
Lamentan que el equipo de gobierno no haya aplicado, como otras localidades, medidas para amortiguar el impacto de la subida
El Partido Popular ha votado en contra de la subida de la tasa de basuras aprobada hoy en Pleno extraordinario por el equipo de gobierno, que va a suponer un incremento del 100% del impuesto para la mayor parte de viviendas y del 150% para las actividades comerciales, industriales y de hostelería.
Los populares han lamentado, de entrada, el poco tiempo dado por el equipo de gobierno a la oposición para estudiar la nueva ordenanza, ya que el Pleno extraordinario se convocó el miércoles por la noche y los ediles solo han tenido 24 horas para analizar una propuesta que es muy compleja y no se puede despachar de un vistazo.
En definitiva, apuntaba el portavoz popular, Miguel Ángel Salguero, “han tenido tres años para aprobar esta tasa y al final, como siempre, lo han tenido que hacer a última hora y por vía de urgencia”, ya que la tasa debe estar aprobada y publicada con anterioridad al 1 de enero de 2025, que es cuando se produce su devengo.
Mal en las formas, peor en el fondo
Al margen de las prisas y el poco margen dado a la oposición para hacer su trabajo, desde el Partido Popular se considera que la tasa recién aprobada “no ayuda a cumplir con los objetivos de mejorar la economía circular con un mayor reciclaje” ni va a avanzar en el sentido de “que pague más quien más residuos genera”, algo que está en el espíritu de la propia medida.
La realidad, decía Salguero, es que “esta tasa va a hacer que todos los vecinos paguen más, con independencia de su responsabilidad individual o no, y sin que ello derive una mejora del servicio”. Y es que, al tarificar por zonas, va a acabar pagando lo mismo una persona soltera que viva sola y genere muy pocos residuos que una familia de cinco miembros que viva en la misma zona, aunque por lógica genere mucha más basura.
Sin amortiguar la subida
Por otro lado, el PP considera que “se ha perdido una oportunidad de estudiar medidas que amortigüen el impacto de esta subida, como sí han hecho otros ayuntamientos rebajando otros impuestos como el IBI o estableciendo sistemas de bonificación a los vecinos que reciclan y aliviando el precio de otros impuestos o de servicios municipales”, algo que resulta “incomprensible para un ayuntamiento que se supone “Verde” desde hace años”.
En definitiva, concluían los populares, una subida de la que “el único beneficiado es el Ayuntamiento, que va a tener mucho más dinero para emplear, paradójicamente, en otras áreas”.
Me parece bien que estén en contra. Tomamos nota para ver si realmente bajan la tasa cuando gobiernen. Tiraremos de hemeroteca entonces