El PSOE espera que la Iglesia Evangélica aclare si el Ayuntamiento les ha cedido un local a cambio de afiliarse al PP
El pasado mes de enero, a través de una moción presentada a Junta de Gobierno por la alcaldesa de Villena, el Partido Popular acordó ceder a los fieles de la Iglesia Evangélica de Philadelphia un local de propiedad municipal en el barrio de San Francisco. Desde entonces se especula con que la alcaldesa y los tres concejales afines al presidente provincial, José Joaquín Ripoll, hayan realizado esta gestión en contraprestación por la afiliación masiva de integrantes de esta comunidad religiosa al Partido Popular de Villena. Con ello pretenderían asegurarse el mayor número de votos posibles, a la hora de determinar la candidatura a las siguientes elecciones municipales.
Ante esta situación, el portavoz del Grupo Municipal Socialista, Carlos Beltrán comentaba hoy que no tienen constancia de que esto se haya confirmado o desmentido hasta ahora por ninguna de las partes implicadas. Lo único que sabemos es que al parecer hay una denuncia interna dentro del propio PP, decía. Desde el PSOE se ha mantenido el silencio hasta ahora, porque han solicitado una reunión con uno de los responsables de la Iglesia Evangélica para que les explique si todo lo que se está rumoreando es cierto. Le damos la oportunidad de que lo aclare porque nos parecería muy grave que fuera cierto que se les ha dado un local por afiliarse al PP, aseguraba. Igualmente han pedido explicaciones acerca de la legalidad de este acuerdo a la Secretaria Municipal, quien han respondido que desde el punto de vista jurídico es correcto.
Otra cosa que les parece extraña en este asunto es que habiendo tenido durante tanto tiempo la posibilidad de ceder un local a esta asociación en tiempo y forma, se lleve por sorpresa esta operación a una Junta de Gobierno sin firmar ningún acuerdo de colaboración entre el Ayuntamiento y la Iglesia Evangélica. Más cuando el propio consistorio exige a todas las asociaciones la firma de un convenio a la hora de colaborar o ceder instalaciones. Esto llama la atención y puede llevar a algunos a pensar que esto no está claro, afirmaba Beltrán. Según él, también es llamativo que no haya sido la Concejalía de Bienestar Social sino la alcaldía la que ha propuesto esta cesión, siendo algo de su competencia. Esto vuelve a dar sensación de desgobierno en el Ayuntamiento, añadía.
Por otra parte les parecería tremendo, en el caso de que se confirmase, que es un cargo de confianza del equipo de gobierno el que se está encargando de esta campaña de afiliación al Partido Popular entre los miembros de la Iglesia Evangélica. Y es que ese cargo de confianza no está contratado para este tipo de negociaciones, sino que se supone que trabaja como asesor de Ocio y Juventud en el Ayuntamiento. Es grave que, en lugar de emplearlo en las funciones que le corresponden, estemos malgastando dinero público en actividades propias internas de un partido, concluía el concejal.
