El PSOE propone celebrar dos plenos al mes para que no queden mociones pendientes

Después de que el pasado jueves la alcaldesa decidiera que los plenos ordinarios concluyan a las 12 de la noche, el Grupo Municipal Socialista va a pedir que se modifique el régimen de sesiones plenarias del Ayuntamiento para que se puedan celebrar al menos dos plenos cada mes. Pretenden con ello que no se produzca un “embotellamiento” de propuestas e iniciativas a tratar en cada pleno y que no queden pendientes asuntos que pueden ser importantes para el futuro de Villena.
Su portavoz, Carlos Beltrán, insistía en que fue una decisión unilateral que la alcaldesa Celia Lledó que les fue comunicada esa misma tarde en una Junta de Portavoces convocada a toda prisa y sin orden del día. Al respecto añadía que los grupos de la oposición informaron de este cambio a sus ediles inmediatamente, “pero parece que en el Partido Popular hubo concejales que no se enteraron hasta que ocurrió el corte del pleno”.

Y aunque no se pueden oponer a la decisión de la primera edil, los socialistas consideran “grave” que por querer terminar antes el pleno se dejaran pendientes asuntos importantes. En este sentido Beltrán apuntaba que la alcaldesa ya había tomado la decisión cuando elaboró el orden del día y por eso puso al principio “los asuntos de sus concejales más queridos (los de Hacienda, Turismo y Urbanismo), dejando para el final los de la oposición y de los concejales que le han dado problemas”. Según él al menos en esta ocasión valía la pena hacer el esfuerzo de alargar una hora más la sesión para terminar con el orden del día.

Entre otras propuestas se quedaron sin tratar la aprobación de la Carta de Buenas Prácticas en la Administración, la cesión a Cruz Roja de un vehículo donado al Ayuntamiento, la ayuda a los afectados por el tsunami de Indonesia o la adhesión al expediente para que las sociedades musicales de la Comunidad Valenciana sean declaradas Bien de Interés Cultural, “por lo que el 14 de noviembre la Sociedad Musical Ruperto Chapí no podrá llevar este apoyo a la reunión donde se recogerán adhesiones”, afirmaba el edil del PSOE.

No se debatió sobre el análisis de los olores que se originan en la planta de basura, ni de su moción exigiendo la dimisión del concejal de Hacienda, José Joaquín Valiente. Y tampoco de la oposición a la instalación de una planta incineradora en Villena. "A Celia Lledó le molesta el diálogo”, manifestaba Beltrán, quien le acusaba de evitar que se traten mociones en las que se había llegado a un acuerdo del PP con la oposición. Además aseguraba que la alcaldesa “se tapa la nariz para no oler las basuras” y demora el rechazo a una incineradora. Según él este retraso respecto a otras poblaciones que se están movilizando en contra, puede hacer que finalmente esta planta le toque a Villena.

Beltrán hacía hincapié en que la única perjudicada por estos “atascos” al tratar los asuntos es la ciudadanía. Y por último recordaba a Lledó que “el único lugar donde podamos puede presentar iniciativas y defenderlas es el Pleno, porque ella rompió una tradición de 30 años dejando fuera de la Junta de Gobierno Local a los grupos de la oposición".