El Servicio de Ayuda a Domicilio, el gran olvidado en la pandemia
Fueron esenciales, trabajaron casi sin EPIs, se contagiaron… y aún están sin vacunar
Las trabajadoras del Servicio de Ayuda a Domicilio (SAD) del ayuntamiento de Villena, una función externalizada y que presta una empresa tras ganar la licitación, han denunciado que a día de hoy siguen sin vacunar.
Trabajando sin parar desde el principio del estado de alarma, sin negarse a trabajar pese a “desconocer cómo nos podía afectar el virus”, el SAD es un servicio esencial que hubo que mantener en todo momento, pese a que, al comienzo de la pandemia, por no tener no tenían ni equipos de protección individual (EPIs) suficientes facilitados por parte de la empresa. No obstante, sí recibieron material por parte del ayuntamiento, que realizó a las trabajadoras las pertinentes pruebas PCR como al resto del personal municipal.
En cualquier caso, algunas de las trabajadoras se vieron contagiadas por el virus… y las que no lo hicieron, temen contagiarse en cualquier momento, porque a pesar de que la vacunación de la población cada día avanza a mayor ritmo, las trabajadoras de este servicio no han sido vacunadas hasta el momento, al contrario que el personal sanitario o los trabajadores de centros de mayores o de personas dependientes, por citar solo algunos colectivos.
Las trabajadoras reconocen, en un escrito enviado a EPdV, que tanto el ayuntamiento como la empresa están presionando a la Conselleria de Sanidad y a Salud Pública para que se solucione este problema, pero hasta el momento “no tenemos respuestas y siempre ponen alguna excusa”.
Por ello, las trabajadoras, un total de 8 profesionales que atienden habitualmente a unas 50 personas, mayores y dependientes que en la mayoría de los casos requieren ayuda y asistencia higiénico-sanitaria, así como ayuda para sus paseos o compras semanales, se consideran a sí mismas “las grandes olvidadas de la pandemia”.