Abandonad toda esperanza, salmo 41º
Vaya por delante que Kyle Baker es un cachondo. Un verdadero cómico. Un auténtico cartoonist. Su obra bebe tanto de Will Eisner como de Tex Avery, el demencial ilustrador profesional de la Warner que se las hacía pasar moradas a Elmer Gruñón y al Coyote.
El Show de Cowboy Wally, su primer cómic para la línea Vertigo, es un documental en viñetas, un Ciudadano Kane en clave de humor desatado, donde investiga el auge y caída de un estúpido convertido en figura mediática, un verdadero hijo de perra que se montó en el dólar gracias a la estupidez del prójimo, un poco mayor (pero sólo un poco) que la suya propia.
Su despiadado sentido del humor, más emparentado con Matt Groening, genial alma máter de Los Simpson, o Seth McFarlane (no se pierdan su serie Padre de familia), que con el caca-culo-pedo-pis de South Park, no deja títere con cabeza a lo largo de la revisión de la vida y milagros del protagonista, incluyendo sus programas televisivos infantiles presentados por superhéroes pederastas, o una marciana versión del Hamlet de Shakespeare condensado en veinte minutos, rodado en la cárcel y con presos y figuras troqueladas como actores del drama.
Pero donde Baker demuestra su fuste como verdadero genio del arte secuencial es en You are here, obra posterior que en España vio la luz antes que su mencionado debut, y que cuenta la historia de Noel Coleman, un ilustrador que oculta a su prometida su oscuro pasado como delincuente... hasta que ese pasado, como en las mejores y más tradicionales muestras del género negro, vuelve para pasarle factura.
En las páginas de esta novela gráfica, que aúna el drama romántico y el thriller, descubrimos el verdadero dominio del medio que su autor demuestra poseer con una osadía arrebatadora y arrogante. Sus páginas están cargadas de una poderosísima energía cinética, y en ellas somos testigos de su experimentación con el código del cómic, prescindiendo de la composición con viñetas tradicionales, así como de los bocadillos, como ya hiciera el veterano Harold Foster en su fundacional Príncipe Valiente.
Muchas son las sensaciones que despierta Baker en You are here, pero quedémonos con lo que podríamos llamar el episodio del atracador, donde la inocente Helen, ante un Noel atónito, se enfrenta con todo su candor a un navajero que pretende robarles. Los tres acaban mirando el amanecer, y una vez el atracador se marcha, los dos protagonistas se quedan solos. Lo que Baker logra en apenas dos viñetas, dejando al descubierto los sentimientos de sus personajes, no puede conseguirse en ningún otro arte, ni siquiera en el cine. Es un privilegio del noveno arte: verdadera poesía que se cuela entre las viñetas.
El Show de Cowboy Wally y You are here de Kyle Baker están editados por Planeta de Agostini Comics.
