El temporal deja nieve y árboles caídos en la pedanía de La Encina
El temporal de frío y viento que azotó España durante la pasada semana también se hizo notar en Villena. Temporal que en el casco urbano sólo dejó bajas temperaturas y lluvias que vendrán muy bien para recargar nuestros acuíferos. Sin embargo, sus efectos han sido más visibles en otras zonas del término municipal, especialmente en la pedanía de La Encina, a 16 kilómetros de la ciudad.
En la mañana del pasado viernes los campos de La Encina quedaban cubiertos por una fina capa de nieve que se deshizo a lo largo del día por la fina lluvia que no dejó de caer. Sin embargo, la noche llegó con una bajada de las temperaturas que propició que se produjera una nueva nevada que, tras caer los copos lentamente durante la madrugada, volvió a pintar de blanco las calles, tejados, campos y árboles. A la mañana siguiente, la del sábado, un manto de unos cinco centímetros de espesor cubría La Encina y sus alrededores, desde Fontanares hasta las cercanas sierras de Almansa.
Pero parece ser que no fue la nieve, sino el fuerte viento que sopló durante la noche del viernes al sábado el causante de que dos árboles se desplomarán en las calles Mariano Ruiz y Juan Palao. En el primer caso, un pino piñonero de unos 10 metros de altura que por su aspecto exterior parecía enfermo cayó hacia la calzada, dañando en su caída la antena de televisión de la vivienda contigua. Se da la circunstancia de que en febrero de 2006 ya se produjo la caída del pino situado junto a éste sobre esa vivienda. Afortunadamente ni en aquella ocasión ni en ésta hubo que lamentar heridos ni se vio dañado ningún vehículo aparcado en esa calle. Curiosamente, el otro pino caído en la calle Juan Palao sí causó leves daños en el automóvil sobre el que cayó, pero tampoco hubo heridos. La brigada de jardines del ayuntamiento de Villena se encargó de retirar los restos de los árboles durante el fin de semana.
Por otra parte, en la tarde del sábado una gran rama se desprendía de otro pino (situado en la avenida de la Constitución de la misma pedanía), quedando colgada del tendido eléctrico. Ante el peligro de la situación se dio aviso al servicio de emergencias, acudiendo una dotación del parque de Bomberos de Villena que se encargó de trocearla para retirarla del lugar.
Al margen de estos sucesos que, por fortuna, no revistieron mayor gravedad y de algún pequeño resbalón por el hielo acumulado en las calles, la nevada permitió a vecinos y visitantes de poblaciones cercanas disfrutar de un fin de semana blanco entre peleas con bolas de nieve y los típicos muñecos de nieve, como no.