El Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana anula la concesión del servicio de agua potable y alcantarillado
El Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana ha desestimado el recurso interpuesto por el ayuntamiento de Villena en contra del fallo judicial por el que se desestimaba la adjudicación a la UTE compuesta por Viarsa, Saico y Aguas de Valencia, que ganó la concesión en una adjudicación rodeada de polémica, ya que algunos representantes políticos, especialmente Antonio García Ágredas, estimaban que la mejor oferta era la presentada por la mercantil Aqualia, integrada en el grupo FCC y que, en su concurso a la adjudicación de Villena, al parecer concurría asociada con algunos industriales de nuestra ciudad.
Dicha adjudicación, por un periodo de 12 años, tuvo lugar en Pleno el 8 de agosto de 2004, mediatizada por unas declaraciones previas del entonces concejal en la oposición Antonio García Ágredas, que amenazó con llevar a los tribunales por posible prevaricación a los ediles que apoyaran a la UTE que a la postre resulto ganadora. En aquel Pleno, con 16 votos a favor, 3 abstenciones y el voto en contra del propio Ágredas, se concedió la adjudicación. El equipo de gobierno en pleno apoyó esta moción, así como 5 concejales del Partido Popular, encabezados por Vicente Rodes. Por el contrario, los entonces concejales en la oposición Juan Palao, Jesús Martínez y Celia Lledó se abstuvieron ante la existencia de nuevos informes que deberían haber motivado otra reunión de la Mesa de Contratación. No obstante, Palao señaló que el procedimiento se ha realizado de forma legal en todo momento.
Aqualia interpone denuncia
Unos días después, el 30 de agosto, Antonio García Ágredas, tras recabar asesoramiento legal, anunciaba la interposición de un contencioso administrativo contra la adjudicación del servicio, afirmando públicamente que aquí debe de pasar algo raro y cosas especiales que desconozco, porque había compañías que daban un mayor beneficio al ayuntamiento, en referencia a la oferta de la mercantil Aqualia.
y el juez le da la razón
Casi dos años después, el 31 de marzo de 2006, se recibe en el ayuntamiento la sentencia del contencioso administrativo, anunciando que se estima parcialmente el recurso interpuesto por Aqualia en contra del acuerdo de Pleno de 8 de agosto de 2004, anulando la adjudicación por no ser conforme a derecho y desestimando la petición de la parte demandante, que pedía que se le adjudicase la contrata.
El entonces concejal de Aguas, Jesús Santamaría, restaba importancia a la sentencia señalando que confiaba en la inocencia de la Mesa de Contratación y la situación no afectaría al suministro de agua potable en los hogares villenenses. Al mismo tiempo, anunciaba que el servicio jurídico externo contratado durante la pasada legislatura iba a presentar un recurso el que ahora ha sido desestimado, considerando que no habrá que repetir la adjudicación.
Nuevo concurso de adjudicación
Desestimado el recurso del ayuntamiento, lo que convierte en firme la sentencia y la anulación de la adjudicación, el ayuntamiento se va a ver obligado a convocar un nuevo concurso. Según los profesionales consultados por El Periódico de Villena, a partir de la recepción de la notificación, el ayuntamiento dispone de 20 hábiles para convocar voluntariamente un nuevo concurso. De no ser así y es difícil que lo sea, puesto que apenas hay tiempo material, será el juzgado quien ordene al ayuntamiento la ejecución de la sentencia.