Este es el título del artículo escrito por Risto Mejide hace ya unos meses y que ahora ha pasado a convertirse en un libro del mismo autor. Sobre este famoso artículo podríamos disertar durante mucho tiempo. Estoy bastante de acuerdo con lo que se muestra en el mismo, aunque con otras partes no lo estoy tanto.
A pesar de esto, estoy de acuerdo en que el juego ha cambiado. Si estás sin trabajo no basta con que busques trabajo, ahora todo es distinto, los trabajos y las oportunidades hay que crearlas, potenciarlas o generarlas. Ya sé que suena complicado y en realidad lo es, pero la opción alternativa, quedarse esperando la ocasión, ya no es una opción viable. Trabajo hay y oportunidades también, sólo que es mucho más difícil detectarlas que antes y has de mostrar y demostrar tu talento y tu valía para desarrollar determinadas funciones laborales.
En algunos cursos que he ido impartiendo sobre búsqueda de empleo en redes sociales me encuentro a personas perdidas, desorientadas y desanimadas que, lejos de aprovechar los conocimientos que les pueden servir y ayudar, entienden que estas nuevas posibilidades que internet nos ofrece no son para ellos. Si trabajabas en un sector que se ha agotado o en un determinado lugar que no te aporta posibilidades hay varias opciones, cambiar de sector o cambiar de lugar. No podemos pretender que la cosa vuelva a ser como antes porque todo ha cambiado. Ya sé que es difícil cambiar, atreverse a hacer otra cosa. Es fácil pensar que sólo vales para lo que te has dedicado hasta ahora, echarle la culpa a la crisis, pensar que todo se arreglará solo... Hay algunas creencias que tenemos profundamente arraigadas y que nos perjudican en muchos momentos. Debemos darnos cuenta de cuáles son y cómo nos están limitando.
Atrévete a dejarte ver, a hacer nuevas cosas. Lo primero, piensa qué sabes hacer, en qué eres bueno, en qué sueles marcar la diferencia. No importa que no lo hayas hecho antes de forma profesional. Si puedes, localiza aquello que más te apasiona, aquello con lo que se te pasa el tiempo volando y lo que más te gusta hacer. Dedica tiempo a perfeccionarte en ello, a realmente ser el mejor y a que cuantas más personas mejor conozcan tu trabajo. Pronto, antes de que te des cuenta, surgirán oportunidades relacionadas con ello. Las oportunidades están más cerca de lo que pensamos.
No creas que doy lecciones que no pongo en práctica, estoy en pleno proceso de cambio, poniendo en marcha todo lo que comentamos. Me duele ver personas que se cierran puertas por lo que otros o ellos mismos piensan sobre sus limitaciones. Tenlo claro, puedes hacer lo que decides que puedes hacer. Para ello basta con decidirlo y poner mucho trabajo en ello. Por lo tanto, deja de buscar trabajo, haz algo diferente a los demás y deja que las oportunidades surjan dejándote ver y demostrando que eres el mejor en lo que decidas serlo.
¿Empezamos?
