Errores frecuentes que generan atascos en casa y cómo evitarlos
La acumulación de residuos en las tuberías no solo dificulta el paso del agua, sino que también provoca malos olores y puede generar filtraciones

Los atascos en el hogar representan una de las incidencias más molestas en el día a día. Un fregadero que no drena, una ducha con el agua estancada o un inodoro que rebosa son problemas que pueden derivar en averías mayores si no se actúa a tiempo. La acumulación de residuos en las tuberías no solo dificulta el paso del agua, sino que también provoca malos olores y puede generar filtraciones. Identificar los errores más habituales que conducen a este problema es clave para evitar gastos innecesarios y situaciones desagradables, estos son algunos consejos de profesionales como desatascos La Fallera.
Uso inadecuado del fregadero: residuos que obstruyen las tuberías
El desagüe de la cocina es una de las zonas más propensas a sufrir obstrucciones. Al verter restos de comida, aceites o posos de café, se forman acumulaciones que, con el tiempo, reducen el diámetro de las tuberías. Muchos piensan que el agua caliente disuelve la grasa, pero en realidad solo la desplaza, provocando que se adhiera a otros residuos y genere un bloqueo progresivo. También es frecuente el uso de detergentes en exceso, lo que contribuye a la formación de una película viscosa en el interior de los conductos.
Cabello y productos en la ducha: el enemigo silencioso de los desagües
Los desagües de las duchas y bañeras acumulan pelos y residuos de productos de higiene, como geles, champús y acondicionadores. Aunque parecen líquidos, muchos contienen aceites y espesantes que se adhieren a las paredes de las tuberías. Con el tiempo, la mezcla de estos productos con el cabello crea una obstrucción compacta que dificulta el paso del agua. Sin un mantenimiento adecuado, el drenaje se ralentiza hasta convertirse en un problema más grave.
Papel higiénico y objetos extraños en el inodoro: un error costoso
Arrojar toallitas húmedas, algodón o papel de cocina al inodoro es una práctica común que genera bloqueos importantes. A diferencia del papel higiénico, que se deshace con el agua, estos materiales conservan su estructura y se adhieren a otras partículas en el interior de las cañerías. Aunque algunos productos se etiquetan como biodegradables, su descomposición es mucho más lenta de lo que se cree, favoreciendo la formación de tapones difíciles de eliminar.
Tuberías sin mantenimiento: el factor olvidado que empeora los atascos
Muchas obstrucciones pueden evitarse con un mantenimiento regular. En viviendas antiguas, las tuberías pueden contener residuos acumulados durante años, reduciendo su capacidad de evacuación. La ausencia de una limpieza periódica permite que la cal, los sedimentos y pequeños restos de materiales se adhieran al interior, formando una barrera que limita el paso del agua. Cuando finalmente se produce un atasco, su eliminación resulta mucho más complicada.
Jabón y cal: la combinación que endurece los residuos en las cañerías
El agua con alto contenido en minerales contribuye a la acumulación de cal en las tuberías, lo que favorece la adherencia de residuos y reduce el flujo de agua. Cuando la cal se mezcla con los restos de jabón, se forman depósitos sólidos que actúan como pegamento para otros elementos, acelerando la obstrucción. Este problema es especialmente frecuente en zonas con agua dura, donde los efectos pueden agravarse si no se utilizan productos adecuados para disolver los residuos.
Materiales inadecuados en la instalación de tuberías: un problema estructural
El uso de tuberías de diámetro inadecuado o materiales de baja calidad puede propiciar atascos constantes. En algunas construcciones, se instalan tuberías de menor tamaño para reducir costes, lo que aumenta el riesgo de bloqueos al reducir el espacio por el que circula el agua. Además, algunos materiales, como el hierro galvanizado, tienden a corroerse con el tiempo, acumulando partículas de óxido que contribuyen a la formación de tapones.
Productos químicos agresivos: una solución temporal con efectos adversos
Muchas personas recurren a productos químicos para disolver atascos sin considerar sus efectos a largo plazo. Si bien algunos desatascadores pueden eliminar bloqueos superficiales, su uso frecuente daña las tuberías y genera acumulaciones de residuos químicos que pueden endurecerse con el tiempo. Además, el contacto prolongado con sustancias agresivas puede debilitar las juntas y provocar fugas que comprometen la estructura del sistema de desagüe.
Acumulación de residuos en patios y desagües exteriores
Las hojas, ramas y sedimentos que se acumulan en los desagües exteriores pueden causar atascos que afectan el drenaje de toda la vivienda. En épocas de lluvia, estos residuos se compactan y generan bloqueos que impiden la correcta evacuación del agua. Si no se realiza una limpieza regular, el problema se agrava con la aparición de hongos y bacterias que pueden afectar la calidad del agua en el entorno.
Conclusión
Evitar atascos en el hogar requiere un uso responsable de las instalaciones de drenaje y un mantenimiento adecuado. La acumulación de residuos, el uso inadecuado de ciertos productos y la falta de revisiones periódicas son los principales factores que contribuyen a este problema. Adoptar hábitos preventivos y realizar limpiezas regulares puede evitar obstrucciones y prolongar la vida útil del sistema de tuberías.