“Escribir una novela ha sido una experiencia espectacular”

A finales de 2020 salía a la venta “Jinetes en la tormenta”, primer libro del villenense Juan Miguel Ferri, una novela de suspense y acción que atrapa al lector desde sus primeras páginas y no lo suelta, literalmente, hasta terminar el libro de una sola sentada, cosa que ha sucedido a muchos lectores, entre los que nos encontramos.

¿Qué hace un experto en comercio internacional publicando un libro?

Es uno de esos proyectos que siempre he querido hacer y vas retrasando por mil motivos, pero la pandemia, que ha hecho mucho daño a mi sector, me ha dado el tiempo y la excusa para hacerlo, porque la alternativa era darse cabezazos contra la pared en casa. El trabajo ya estaba empezado, pero el confinamiento me permitió darle el arreón final, trabajar la edición y terminarlo.

¿Cómo nació “Jinetes en la tormenta”? ¿Por qué esta historia, por qué en Madrid?

Hay distintos motivos, pero básicamente me interesaba mucho el tema a raíz de unos documentales y de lo que pude investigar después, hasta llegar a pensar que podía valer la pena hacer una novela sobre ello. En cuanto a la ciudad, soy un enamorado de Madrid y me parece una ciudad estupenda para ubicar una novela, saliendo de los típicos Nueva York, Londres o París, que nos quedan muy lejanos y no los sentimos como algo tan nuestro.

¿En qué escritores te has inspirado para escribirla? ¿Cuáles son tus referencias?

Me gusta mucho la novela negra clásica, por supuesto Conan Doyle y Sherlock Holmes, y también escritores como Raymond Chandler y su personaje Philip Marlowe. Ahora también estoy leyendo mucho a Lorenzo Silva, una “receta” de mi editora y correctora Ana Valdés, que no hace más que recomendarme lecturas.

Lorenzo Silva se ha convertido en un experto en la Guardia Civil. ¿Hasta qué punto has investigado sobre la Policía Nacional para escribir “Jinetes en la tormenta”?

He buscado muchísima documentación, repasando todo lo que hay en internet sobre el Cuerpo, escalas, etc., pero siempre hay un punto en el que te falta algo, y fui tirando de contactos porque necesitaba un Policía Nacional, al que acabé llegando gracias a un amigo, y que me pudo concretar todos los detalles que necesitaba, aunque también es cierto que me he tomado alguna licencia en la novela, sin que ello signifique que el texto deje de ser verosímil. Para mí era muy importante que tuviera mucho parecido con la realidad y que si lo lee algún policía no se eche las manos a la cabeza.

¿Es muy traumático el paso de lector a escritor?

Es muy difícil, empezando por la página en blanco, y la pandemia me ha hecho darme cuenta de que escribir es una cuestión de hábito. Hasta la pandemia tenía escritas cosas, pero muy a lo largo del tiempo, sin constancia, y el día que tenía un rato y me sentaba a escribir no me venía nada a la cabeza… Entonces descubres que lo importante es sentarse y trabajar de forma constante, aunque luego revises y acabes tirando a la basura la mitad del trabajo. Y así es como pude llegar a percibir la magia, cuando los personajes tiran por su lado y llega un punto en el que ni piensas, limitándote a teclear porque los personajes están haciendo lo que quieren, saltándose incluso la idea original que yo tenía como escritor. Como experiencia, para mí ha sido espectacular.

¿Qué crítica sobre el libro te ha gustado más? ¿Y la que menos?

Hay de todo. Mover un libro fuera de tu círculo es muy difícil, y yo aposté por ofrecer las primeras 15 páginas a personas que hacen crítica en Instagram, Youtube y Twitter, y me comprometí a enviarles posteriormente el libro si esas páginas iniciales les habían gustado. Me propuse llegar a 50 influencers, al final llegué a unos 75 y ya me han pedido unos 60 libros para hacer críticas y reseñas. En general las críticas están siendo buenas, coincidiendo todo el mundo en que el libro engancha. En el aspecto negativo, hay personas acostumbradas a leer tochos de 600 páginas que dicen que “Jinetes en la tormenta” se les hace muy corto, algo de lo que soy muy conscientes desde la primera revisión por parte de Pepe Silva y Ana Valdés. Siendo consciente de que hay cosas por mejorar y pulir, que te digan que la novela, siendo la primera, está bien escrita, es toda una satisfacción.

¿Qué tal está funcionando la venta? ¿Te sorprende su éxito en países a priori tan lejanos como México o Argentina?

Estoy muy contento. En Villena está funcionando muy bien en Itaca y en Papelicopy, también en 80 Mundos, en Alicante, y en Albacete. Lo que no me esperaba son las valoraciones que está recibiendo en Amazon, estando durante todas las navidades en el Top 10 de Amazon México en 3 categorías distintas, y siendo el más vendido durante tres días. En Argentina está uno de los críticos a los que envié inicialmente la novela, la leyó y ha hecho una crítica muy positiva, con una reseña casi más larga que el libro, lo que está ayudando mucho.

¿Qué recorrido esperas que tenga la novela?

Sigo experimentando y aprendiendo sobre la marcha y también soy muy realista: es muy difícil progresar en el mundo literario, y más aún con las dificultades que está viviendo el sector en esta época. Realmente es un mundo muy, muy complicado y no estoy por la labor de hacerme ilusiones. Cuando me preguntan, digo que estoy jugando una temporada a ser escritor.

¿Tienes algún otro proyecto literario en mente?

Sí, empezando por la segunda parte de “Jinetes en la tormenta”, en la que voy a profundizar más en los personajes y en cosas que se han quedado en el tintero en la primera, pero sin renunciar al ritmo y a la tensión del libro. Y siguiendo por algún proyecto más del que aún es pronto para hablar…