Esquembre descarta “arbitrariedad” alguna en el pago del complemento de productividad a los funcionarios municipales

Tras las quejas de un numeroso grupo de funcionarios municipales, descontentos con el pago del Complemento de Productividad a 94 trabajadores, el alcalde, Francisco Javier Esquembre, ha explicado que “desde Alcaldía en ningún momento se ha actuado con arbitrariedad, sino con una selección de objetivos que añaden un valor al trabajo de los funcionarios”.
El alcalde recordaba que el reglamento que estipula estos pagos, aprobado en enero de este mismo año, contó con el visto bueno de los sindicatos en la mesa de negociación. Asimismo, añadía que “desde Alcaldía se marcaron objetivos diferenciados pero no para toda la plantilla; no ha habido café para todos, y así lo sabían los sindicatos. Se han elegido unas áreas concretas –intervención, secretaría, bienestar social, policía…– donde entendíamos que había una labor especial que hacer”. Como ejemplo, Esquembre explicaba que “aligerar los trámites en intervención y pagar antes las facturas es algo que beneficia a toda la ciudad, y por eso se ha intentado incentivar”.

No obstante, el alcalde sí reconocía que “el reglamento está por mejorar” y para ello “se ha pedido a cada sección sindical una propuesta de mejora, pero quiero insistir en que el alcalde no tiene especial interés en dar un dinero a nadie; de hecho, hemos pedido a la parte laboral que sean ellos quienes determinen su organización y su mejor dedicación, aunque entiendo que habrá que llegar a un acuerdo conjunto”.

Asimismo, Esquembre subrayaba que “es bueno detallar objetivos a cumplir más allá del trabajo habitual, porque no sería normal que alguien cobrara más simplemente por hacer su trabajo. Por ello, insisto en que criticar la ‘arbitrariedad’ está fuera de lugar, aunque reconozco que el reglamento puede estar por mejorar”, decía.

Preguntado por si en un futuro se pensaba pagar a otros funcionarios no beneficiados ahora, Esquembre señalaba que “estamos en pleno proceso para regular cosas que estaban en el limbo y se hacían por tradición o por acuerdos entre partes pero fuera de norma. Ahora intentamos que cada persona ocupe su puesto y cobre por ello, reconociendo unos complementos ganados en sentencia judicial por los trabajadores y aspirando a mejorar el reglamento de productividad para subsanar sus deficiencias, que las reconozco, pero no puedo aceptar que se hable de arbitrariedades”.