Extraen 500 larvas de la palmera afectada por el picudo rojo en las Virtudes
Ayer, la concejalía de Agricultura y Medio Ambiente adelantaba que se había detectado la presencia del picudo rojo en una de las palmeras de la explanada del Santuario. Por el duro clima, Villena estaba excluida hasta el momento de la peligrosa afección de este escarabajo volador procedente del sudeste asiático, que ya amenaza desde hace tiempo los históricos palmerales de Alicante, Elche y Orihuela. José Tomás Molina ha informado de que ya se ha realizado un primer tratamiento esta mañana.
El picudo rojo pone sus huevos principalmente en las coronas de las palmeras datileras y canarias. Las larvas penetran por el capitel directamente al tronco, labrando galerías internas de más de 1 metro de longitud que si llegan a dañar la yema apical, provocan la muerte de la palmera. Molina ha explicado que las palmáceas de la Virgen fueron arregladas antes de Fiestas, pero las larvas tardan dos o tres meses en crecer y los síntomas de infestación se han hecho visibles ahora. La amarillez en las palmas, que se marchitan, es el primer indicio de la presencia del picudo rojo, pero aparece cuando ya están gravemente afectadas.
Cerca de 500 larvas se extrajeron ayer de la corteza de esta palmera de más de ochenta años, que ha sido limpiada en profundidad y fumigada tal y como indicaron los Técnicos de Protección Vegetal de Alicante. Aunque el concejal se muestra reticente a talar la histórica palmera, parece que no podrá ser rescatada. El protocolo de actuación recomienda tratar todas las palmeras en un perímetro de 2 kilómetros de radio para evitar el contagio, algo que ya se ha hecho hoy con los ejemplares del Santuario. Los particulares de la zona deben extremar la precaución y realizar los correspondientes tratamientos.
Aunque pueden utilizarse otros tratamientos como las feromonas, Molina propone la endoterapia, que aunque resulta más caro que la fumigación o el chorreo, es también más efectivo al inyectar el producto químico a lo largo del tronco. Esta actuación costaría unos 80 euros por palmera y según el edil se podrá realizar dependiendo del presupuesto.
Aunque Villena cuenta con parque palmeral reducido, deben verificarse todos los ejemplares y establecer los protocolos de tratamiento. Las palmeras del Paseo fueron cerradas recientemente, pero desde la concejalía están planteándose abrirlas para asegurarse de que no están infectadas, pues al estar atadas no dejan ver los síntomas y crean un microclima más propenso a albergar al picudo rojo.
El clima ha excluido hasta ahora a Villena de esta plaga, pero José Tomás Molina cree que el cambio climático podría estar relacionado con el brote, pues tradicionalmente en estas fechas ya hemos sufrido cuatro o cinco heladas y este año el invierno está siendo muy leve.
Grafosis paralizada por falta de presupuesto
El tratamiento de la grafosis de los pinos se ha aplazado hasta la primavera por falta de presupuesto, pero según Molina no es un problema porque es entonces cuando se produce el arranque de los árboles.