Fiestas del Medievo: el orgullo de Villena (crónica, vídeos y cientos de fotos)
Resulta difícil escribir cada año una nueva crónica sobre las Fiestas del Medievo organizadas por la Asociación de Vecinos del Rabal, sencillamente porque ya no quedan adjetivos para definir un proyecto que cada año es más grande y mejor, en el que se implican más ciudadanos, colectivos y empresas, que obtiene una mayor repercusión y atrae a más visitantes a nuestra ciudad y que, en definitiva, nos hace rebosar de legítimo orgullo.
Con el aperitivo previo el viernes por la noche de la actuación del Grupo de Danzas de Villena y el pasacalles de los Gigantes y Cabezudos recuperados por la asociación pro-Restauración de la Ermita de San José, quedaba inaugurado el Mercado Medieval, mercado que ahora es mucho más que eso, son las Fiestas del Medievo, que abrían sus puertas de manera oficial el sábado por la mañana con la llegada de los Reyes Católicos a Villena en 1488 y el pregón del antropólogo Francesc Llop i Bayo.
El jefe de la sección de Museos de la Generalitat Valenciana, un enamorado de las campanas de Villena y recuperador de las de Santa María, volvía a pedir públicamente y con insistencia ante las autoridades locales la recuperación de la Torre del Orejón, símbolo del poder civil frente al eclesiástico, destacaba el carácter único del toque de las campañas en Villena y nos invitaba a olvidar móviles y tabletas y recuperar la comunicación personal, en la calle, frente a frente, tal y como se vive en barrios populares como El Rabal, que a partir de ese momento se llenaba de artesanía, espectáculo, cultura, talleres, amor, bodas, diversión, patrimonio... en definitiva, de vida, actividad y convivencia vecinal.
Recuperar la zona alta, todo un acierto
Desde la calle Teniente Hernández Menor hasta la Plaza de Biar, recorriendo la Plaza Mayor, la Iglesia de Santa María, la Plaza de la Tercia, la Ermita de San José o la calle la Rambla, encontramos un gran número de actividades como cuentacuentos, representaciones medievales, espectáculos de magia, juegos, torneos de lucha, conciertos, representaciones teatrales, talleres, así como numerosos stands de comercio, artesanía, tascas y alimentación, entre otros, que ofrecen a los asistentes la posibilidad de sumergirse durante dos días en el privilegiado entorno medieval que solo las calles del casco histórico de Villena y sus hospitalarios e implicados vecinos ofrecen.
Además, este año, y apoyadas en el nuevo edificio de Colache cuyas puertas han abierto para poder ser contemplado por quienes quieran, las Fiestas del Medievo han ganado terreno hacia arriba, en la misma ladera del Castillo, donde la zona de la Morería se ha convertido en una de las grandes atracciones, acumulando actividades, servicios y visitantes en la zona más degradada del barrio, que nos ha mostrado un increíble potencial por el que definitivamente vale la pena apostar.
Ni un paso atrás
Pero además del espacio ganado, las Fiestas del Medievo también han incorporado actos de nuevo cuño, como dos nuevas representaciones históricas el nacimiento del Señorío de Villena y el Desencuentro del Cid y, coincidiendo con la festividad del 8 de marzo, Día de la Mujer, una representación en dos actos detención y juicio por la mañana, y tortura y muerte por la noche denunciando el feminicidio cometido por la iglesia durante la Edad Media, cuando quemó a decenas de miles de mujeres acusadas de brujería cuando no eran más que parteras, comadronas o curanderas, librepensadoras en definitiva, alejadas de los férreos dogmas religiosos. El acto, no obstante, tenía una segunda lectura, la denuncia y el rechazo a la Ley del Aborto que pretende aprobar el gobierno, una protesta organizada por Colectivo Luna y que concluyó con decenas de mujeres y hombres unidos en el grito de Ni un paso atrás.
Una auténtica gozada
La cita, de la que poco más se puede decir que no se sepa ya, salvo, tal vez, que la celebración de bodas y bautizos ha sido un acierto absoluto por la emoción que aportan y la implicación de todos los invitados, así como que la participación de grupos es cada vez mayor y era una gozada ir de local en local La Corte de los Milagros, Casa Coloma, los Selyúcidas, la Bodega el Caracol, las Cuevas de los Tuaregs, los Alpisteros
para disfrutar de sus decoraciones, ver a grupos de chavales asando un cochinillo en plena calle o disfrutar de un reconstituyente caldo no todo va a ser cerveza y vino gentileza de los moradores del Rincón de Al-Gurrumer
antes de tomar parte en la espectacular Procesión de las Antorchas otro auténtico acierto y poner fin a la jornada disfrutando del animado y vibrante concierto de música celta a cargo de Turdión en la explanada del Castillo y bajo un cielo limpio y estrellado, pues hasta el tiempo se ha querido sumar a la celebración regalándonos un fin de semana estupendo y primaveral.
Pepe Cabanes, presidente de la Asociación del Vecinos del Rabal, destacaba el éxito desde el inicio de esta edición de las Fiestas del Medievo, agradecía una vez más el esfuerzo altruista de las asociaciones y entidades presentes en el evento y, reivindicativo, señalaba que nunca algo tan barato para el ayuntamiento ha tenido una repercusión mediática tan brutal para Villena. De hecho, y al margen de la repercusión que pueda tener a posteriori, las Fiestas del Medievo ya han sido noticia en la prensa nacional y en publicaciones para extranjeros residentes en la costa española, además de protagonista del programa radiofónico Ser Viajeros, de la Cadena SER, emitido en directo el sábado al igual que el año pasado desde la plaza de Biar.
Como siempre que tiene ocasión, Cabanes invitaba a todos los villenenses a disfrutar de su casco histórico, recordando que no se trata de respaldar al Rabal, sino al casco histórico de Villena, que es de todos y en manos de todos está sacarlo adelante para que sea un motor más de la economía de Villena. Y nosotros que lo veamos. Una vez más, nuestra más sincera enhorabuena a quienes hacen todo esto posible.
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